Casa de la Estrella. Donde nació la República libre y soberana de Venezuela en 1830.

Casa de la Estrella. Donde nació la República libre y soberana de Venezuela en 1830.
Casa de la Estrella, ubicada entre Av Soublette y Calle Colombia, antiguo Camino Real donde nació la República libre y soberana de Venezuela en 1830, con el General José Antonio Páez como Presidente. Valencia: "ciudad ingrata que olvida lo bueno" para el Arzobispo Luis Eduardo Henríquez. Maldita, según la leyenda, por el Obispo mártir Salvador Montes de Oca y muchos sacerdotes asesinados por la espalda o por la chismografía cobarde, que es muy frecuente y característica en su sociedad.Para Boris Izaguirre "ciudad de nostalgia pueblerina". Jesús Soto la consideró una ciudad propicia a seguir "las modas del momento" y para Monseñor Gregorio Adam: "Si a Caracas le debemos la Independencia, a Valencia le debemos la República en 1830".A partir de los años 1950 es la "Ciudad Industrial de Venezuela", realidad que la convierte en un batiburrillo de razas y miserias de todos los países que ven en ella El Dorado tan buscado, imprimiéndole una sensación de "ciudad de paso para hacer dinero e irse", dejándola sin verdadero arraigo e identidad, salvo la que conserva la más rancia y famosa "valencianidad", que en los valencianos de antes, que yo conocí, era un encanto acogedor propio de atentos amigos...don del que carecen los recién llegados que quieren poseerlo y logran sólo una mala caricatura de la original. Para mi es la capital energética de Venezuela.

domingo, 22 de octubre de 2017

HENRY, ¿EL STANLEY MILGRAM VENEZOLANO?

Stanley Milgram (Nueva York15 de agosto de 1933 - Nueva York, 20 de diciembre de 1984) fue un psicólogo graduado de la Universidad de Yale que condujo los experimentos del mundo pequeño (la fuente del concepto de los seis grados de separación) y el Experimento de Milgram sobre la obediencia a la autoridad. De familia hebrea, su padre era húngaro y su madre rumana.
Aunque se lo considera uno de los más importantes psicólogos del siglo XX, Milgram nunca estudió psicología durante sus estudios de ciencias políticas en Queens College, Nueva York, donde se graduó en 1954. Se presentó a un postgrado en psicología social en la Universidad de Harvard y fue rechazado inicialmente a causa de falta de estudios de psicología. Fue aceptado en 1954 después de tomar seis cursos de psicología y se graduó en 1960.

Murió en 1984 de un ataque al corazón a la edad de 51 años en su ciudad de nacimiento, Nueva York.

Henry Lisandro Ramos Allup (ValenciaVenezuela17 de octubre de 1943) es un abogado, político y fue el 7º presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela durante el año 2016. Es dirigente del partido socialdemócrataAcción Democrática, en el cual ocupa la posición de secretario general electo por la militancia del partido. En la actualidad es la máxima autoridad de su partido ante la Mesa de la Unidad Democrática, coalición de partidos opositores al gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Mónica Corrales | 20/10/2017 | Web del Frente Patriótico
Desde hace algunos años, muchos nos preguntan el motivo de la pasmosa permisividad del venezolano frente a la tiranía que nos oprime. Tienden a avergonzar nuestra actitud de pasividad y conformismo, con comparaciones históricas resaltadas por héroes de la talla de Bolívar y Miranda, entre otros.
El día de ayer -11 de abril- la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia declaró la inconstitucionalidad de la Ley de amnistía y Reconciliación Nacional sancionada por la Asamblea Nacional el pasado 29 de marzo.
Para nadie resultó sorpresivo el pronunciamiento, ya que llevamos casi dos décadas condicionados a lo que el psicoanalista Erich Fromm definió como “El Concepto de la conformidad Automática”, en su obra “El miedo a la Libertad”.
Pero, ¿qué nos llevó a la adaptación autómata de sanciones y decretos que violan nuestros derechos fundamentales?. ¿Por qué razón nos adaptamos a un sistema oprobioso sin ejercer la requerida resistencia?. ¿Quién, o quiénes nos condicionaron?.
En días pasados se llevó a cabo dentro del Aula Magna de la Universidad Católica Andrés Bello, un evento que contó con la participación del presidente de la Asamblea Nacional Henry Ramos Allup. Decenas, o cientos de jóvenes, en edades comprendidas entre dieciocho y veinticinco años, se concentraron en la entrada del recinto para poder escuchar el “conversatorio” del sujeto en cuestión.
Con un aforo que hasta el propio Luis Chataing ha debido envidiar, arrancó el discurso -show- que para algunos -inocentes- se ha convertido en una suerte de “libreto humorista”. Mientras que para otros -más analíticos- concordamos en que el “libreto” ha sido concebido estructuralmente para cumplir algunas funciones específicas:
Reforzar la conducta de la obediencia.
 Hacernos abdicar a la responsabilidad individual de luchar por nuestra libertad, sin dejarnos más alternativa que sumarnos a una supuesta mayoría “pacífica, democrática y constitucional”; por ende a su dirigencia.
* Asegurar la estabilidad política.
* Enfocar el voto como única “salida”.
* Reforzar el socialismo/populismo.
No tenemos que hurgar con pinzas para encontrar todos estos elementos en el conjunto de las declaraciones de los líderes, o diputados, que conforman la Mesa de la Unidad. Pero específicamente en el caso que nos ocupa del discurso de Henry Ramos Allup en la UCAB, me atrevo a sugerirle al amigo lector utilizar las “pinzas”.
La confesión pública de sus “amistades impresentables”, obedece a la sinceridad espontánea del orador, ¿o se trata más bien de la intención de afianzar la conducta de la permisividad?. Narrar repudiables episodios pasados de Hermam Escarrá infiltrado en la oposición, y al mismo tiempo excusar y justificar la amistad por motivo de “tiempo compartido”. Adjudicarle el calificativo “jocoso” de” Rey Momo” a quien merecidamente algunos preferimos catalogar de: TRAIDOR, es solo uno de los ejemplos a los que nos tiene acostumbrados este señor.
Provocar la carcajada de cientos de jóvenes -entre los cuales probablemente se encontraban algunas de las víctimas, o familiares, del aparato opresor del régimen de Nicolás Maduro – mientras les afianzaba la conducta de aceptación del “presidente buena gente”, hizo que recordara a Stanley Milgram y su controversial experimento de psicología social -Experimento Milgram- sobre la obediencia a la autoridad.
La finalidad de la prueba era medir la disposición de los participantes para obedecer órdenes de una autoridad aún cuando estas pudieran entrar en conflicto con su conciencia personal. ( https://es.wikipedia.org/wiki/Experimento_de_Milgram
“Los aspectos legales y filosóficos de la obediencia son de enorme importancia, pero dicen muy poco sobre cómo la mayoría de la gente se comporta en situaciones concretas. Monté un simple experimento en la Universidad de Yale para probar cuánto dolor infligiría un ciudadano corriente a otra persona simplemente porque se lo pedían para un experimento científico. La férrea autoridad se impuso a los fuertes imperativos morales de los sujetos (participantes) de lastimar a otros y, con los gritos de las víctimas sonando en los oídos de los sujetos (participantes), la autoridad subyugaba con mayor frecuencia. La extrema buena voluntad de los adultos de aceptar casi cualquier requerimiento ordenado por la autoridad constituye el principal descubrimiento del estudio”.

Stanley Milgram. The Perils of Obedience (Los peligros de la obediencia. 1974)
Encontrar una explicación lógica para descifrar nuestra actitud de sumisión ante atropellos que son inaceptables para otros países y sociedades, debe hacernos reflexionar sobre aspectos psicológicos inducidos. Desde niños nos refuerzan la conducta de la obediencia, mientras la desobediencia es castigada. Poco a poco nos vamos condicionando al “reflejo de la obediencia”.
Nos han estado adaptando a pautas que disfrazan de “sentido del deber” nuestros principios éticos y morales para formar parte de una masa de autómatas programados para la obediencia.
Como en el “Experimento Milgram” los sujetos que cumplen órdenes son capaces de cometer actos atroces y considerarse inocentes, hasta llegar a ver sus actos crueles como simples espectadores.
Desobedecer comienza a verse como normal cuando otros comienzan a desobedecer, por eso el régimen es tan meticuloso en el castigo “ejemplar” contra la deserción de un individuo, es un peligro que podría despertar las conciencias de otros.
¿En qué punto fue que los venezolanos comenzamos a ver la libertad como una idea abstracta?. ¿Tenemos miedo a ejercer la libertad?. ¿Idealizamos a quienes nos inducen a obedecer órdenes para protegernos de responsabilidades?.
Todavía no entendemos por qué el mismo día de la instalación de la Asamblea, no se aprovechó la apertura de un micrófono que estuvo silenciado durante 17 años, para denunciar la pérdida de nuestra soberanía, la entrega de nuestro petróleo a Cuba, la obscena injerencia de la satrapía Castrista en nuestras FF.AA, la inexistencia del Acta de defunción de Hugo Chávez, pero sobre todo, la EXIGENCIA de la presentación de la renuncia – si la hubiera- a la nacionalidad colombiana por parte de Nicolás Maduro Moros – independientemente de donde haya nacido, ya que por ser hijo de una madre colombiana y haberse residenciado en territorio colombiano durante su juventud, hecho comprobable porque realizó estudios en una escuela primaria colombiana; nuestra propia Constitución estipula en su artículo 41 que goza de doble nacionalidad, lo cual sería un impedimento para ejercer la Presidencia de la República-
Por qué luego de lo que -aparentemente- fue una lucha titánica por acceder a la palestra, a la cadena nacional y al micrófono; un cursado y veterano político como Henry, prefirió que sus primeras palabras ante el país y el mundo, fuesen un concierto legitimador hacia quien usurpa un cargo. Personalmente perdí la cuenta de las veces que pronunció la rimbombante frase: “Presidente Constitucional de Venezuela”
Nos preguntamos, ¿cómo se sentirán los estudiantes que cometieron el pecado de querer ser libres y rescatar la república -esos que a pesar de todo ingenuamente les votaron- se le diera carácter constitucional a sus días y meses tras las rejas, a sus heridas y cicatrices, a las torturas recibidas?.
¿Por qué extraña razón, quienes se suponen adversan al régimen, no aprovecharon la magnífica fecha del pasado Día de La Juventud para darle voz a las víctimas de esta tragedia?
¿Por qué entre tantos héroes anónimos, prefirieron “sacar del sombrero” a un cantante?, que si bien es cierto ha ganado merecidamente su fama, también es cierto que para nada representa un simbolo de lucha libertaria.
¿Por qué nos estimulan el acato y la obediencia a las autoridades ilegítimas?
Demasiadas preguntas que aún esperan respuestas…seguramente el tiempo se encargará de darnos luces.
Esta fue la frase que el presidente de la Asamblea Nacional tuvo el atrevimiento de pronunciar para el cierre de su discurso refiriéndose a Nicolás:
“Un rey que nada más es una buena persona, es en realidad un pobre rey”.
… Acá le dejo mi respuesta de cierre: “Y un tirano usurpador que nada más es un agente de Castro, es en realidad un peligro para nuestra soberanía y libertad”
Mónica Corrales
@monicacorrales
#LibertadOnada
#SalvaTuVoto

EXPRESIDENTES HISPANOPARLANTES: FUERZAS POLÍTICAS QUE PARTICIPARON EN ELECCIONES EN VENEZUELA FUERON “INSTRUMENTO DEL FRAUDE”
SABRINA MARTÍN | 20/10/2017 | Web del Frente Patriótico
Exjefes de Estado respaldaron las críticas que hizo Luis Almagro, secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA), a la oposición venezolana tras participar en las fraudulentas elecciones regionales que se efectuaron el pasado 15 de octubre.
Los expresidentes aseguraron que los partidos miembros de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) “Se transformaron en instrumento esencial del eventual fraude y demuestran que no tienen reflejos democráticos”.
Los expresidentes miembros de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA) pidieron a la comunidad internacional que sancione al régimen de Nicolás Maduro por las violaciones constantes a la democracia.
En una declaración conjunta se unieron a las declaraciones de  Almagro al asegurar que no se pueden reconocer los resultados de las elecciones regionales en Venezuela, porque “no existen garantías para el ejercicio efectivo de la democracia”.
Los 17 exjefes de Gobierno que firman la declaración se solidarizaron con el pueblo venezolano “en sus aspiraciones de libertad”.
Además recordaron a “quienes no tienen voz: las víctimas mortales producto de la represión del Estado y del hambre, los presos políticos, los exiliados, los miles de migrantes que en búsqueda de libertades que huyen del Gobierno dictatorial de Nicolás Maduro Moros y su Asamblea Nacional Constituyente de facto”.
También hacen un llamado a la comunidad internacional para que avance en “la disposición de las medidas” sancionadoras “contra los integrantes del régimen de Maduro” a fin de alcanzar “el restablecimiento en Venezuela del orden constitucional y democrático que se ha visto fracturado”.
Firman la declaración Oscar Arias, Miguel Ángel Rodríguez, Rafael Ángel Calderón y Laura Chinchilla (Costa Rica), José María Aznar (España), Nicolás Ardito Barletta y Mireya Moscoso (Panamá), Alfredo Cristiani (El Salvador), Vicente Fox, (México), César Gaviria, Andrés Pastrana y Álvaro Uribe (Colombia), Osvaldo Hurtado y Jamil Mahuad (Ecuador), Luis Alberto Lacalle (Uruguay) y Jorge Tuto Quiroga (Bolivia).
El pasado 16 de octubre Luis Almagro dio a conocer su opinión sobre el fraude electoral en Venezuela tras conocerse la victoria del chavismo con 17 gobernaciones de un total de 23.
“La secretaría general de la OEA rechaza todos los actos ilegítimos convocados por Gobiernos ilegítimos, y condena especialmente, una vez más, los abusos (…) No se pueden reconocer los resultados de una elección en un país en el cual no existen garantías para el ejercicio efectivo de la democracia”, dijo.
“Solamente podemos esperar resultados como estos —fraude y violación a los Derechos Humanos— si la estrategia y acción política se alejan de los principios democráticos y se conforman con acuerdos fáciles y circunstanciales”, esgrimió el secretario general de la Organización de Estados Americanos.
Y es que la oposición venezolana representada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) decidió en medio de miles de críticas, participar en las elecciones regionales conociendo las circunstancias irregulares y los abusos del Consejo Nacional Electoral (CNE).
El organismo electoral hizo hasta lo “imposible” para lograr que Nicolás Maduro obtuviera la victoria: retrasó las elecciones hasta que ajustó una fecha a conveniencia; impidió el registro de nuevos electores; modificó el registro de votantes; reubicó a última hora los centros de votación; eliminó el uso de la tinta indeleble y el captahuellas; viólo la ley al impedir la sustitución de candidatos en el tarjetón y permitió el ventajismo descarado por parte del oficialismo.
A esto se sumó la desmotivación de los electores que no estaban de acuerdo con votar con un CNE que se inventó cifras cuando se eligió la ilegítima Asamblea Nacional Constituyente (ANC).
Votar o no votar fue y sigue siendo un dilema en Venezuela: si se salía a votar se estaría legitimando a un CNE fraudulento, y si no se salía a votar se entregarían o regalarían todas las gobernaciones sin luchar; sin embargo, hubo fraude con y sin votos y el chavismo obtuvo casi todas las gobernaciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario