La única fuente con información sobre la vida de San Benito de Nursia es el libro segundo de los Diálogos, escritos por Gregorio Magno.A Benito se le representa habitualmente con el libro de la Regla, una copa rota, y un cuervo con un trozo de pan en el pico, en memoria del pan envenenado que recibió Benito de parte de un sacerdote de la región de Subiaco que le envidiaba. San Gregoriocuenta que, por orden del santo, el cuervo se llevó el pan adonde no pudiera ser encontrado por nadie.
540 dC - Hacia el año 540, San Benito (480-547) escribió su famosa Regula Monasteriorum, que habría de tener una influencia decisiva en el futuro del monacato y la vida religiosa en Occidente. Por obra de San Benito de Aniano (750-821), la Regla benedictina fue ...Por obra de San Benito de Aniano (750-821), la Regla benedictina fue imponiéndose en toda Europa, hasta que a principios del siglo X surgió la Orden de Cluny.En el siglo XII, los cluniacenses contaban con alrededor de dos mil prioratos.Tenian gran enriquecimiento mental, y gran poder temporal
1098 dC - En el momento de la fundación del Nuevo Monasterio (Cister) en el año 1098 los primeros monjes Cistercienses quisieron vivir en toda su pureza la Regla de San Benito.Desde los inicios, la Comunidad se ha dedicado fundamentalmente a la búsqueda de Dios, siendo fiel así al carisma Cisterciense, que por fidelidad a la Regla de San Benito, se traduce en un ponderado equilibrio entre oración y trabajo, como se ha ido realizando a lo largo de la historia desde que San Benito en el Siglo VI escribiera la Regla y fuera cauce para vivir el Evangelio. En el momento de la fundación del Nuevo Monasterio (Cister) en el año 1098 se instan los primeros monjes
12 Mar 1742 - El 12 de marzo de 1742 el Papa Benedicto XIV otorgó indulgencia plenaria a la medalla de San Benito si la persona se confiesa, recibe la Eucaristía, ora por el Santo Padre en las grandes fiestas y durante esa semana reza el santo rosario, visita a los enfermos
1964 - San Benito (c. 480-543) fue proclamado por Pablo VI Patrono de Europa en 1964. En latín y en otras lenguas Benito y Benedicto constituyen la misma palabra. Si bien la Iglesia celebra el 11 de julio a San Benito, la Orden que él fundó celebra su «nacimiento» al cielo en el primer día de la primavera. Padre de la vida monástica en occidente,
INTRODUCCION:
En el siglo XIX se dió un renovado fervor por la Medalla de San Benito. En los trabajos escritos de Dom Prosper Guéranger, abad de Solesmes, y de Dom Zelli Iacobuzzi, de la Abadía de San Pablo Extramuros (Roma), se estudia detenidamente el origen y la historia de la medalla. Desde este ultimo monasterio, verdadero foco de irradiación benedictina en aquella época, se difundió también la devoción a la Medalla. La representación más popular de la misma es la llamada “medalla del jubileo”, diseñada en la Abadía de Beuron (Alemania), y acuñada especialmente para el Jubileo benedictino del año 1880, conmemoración del XIV centenario del nacimiento de San Benito. Los superiores benedictinos de todo el mundo se reunieron para aquella ocasión en la Abadía de Montecasino, y desde allí la Medalla se diseminó por todo el mundo
En la vida de San Benito escrita por San Gregorio Magno, el santo abad muestra una especial devoción hacia la Cruz de Nuestro Señor Jesucristo, signo de nuestra salvación. En uno de los milagros narrados por su biógrafo, un vaso que contenía veneno se quiebra cuando San Benito hace la señal de la cruz sobre él. En otra oportunidad, uno de sus discípulos fue perturbado por el maligno, y el santo le manda hacer la señal de la cruz sobre su corazón para verse librado. En su Regla de los monjes, San Benito indica que cuando un monje iletrado presenta su carta de profesión monástica ante el altar, debe usar como firma una cruz. Estos y otros indicios invitaban a los discípulos del abad San Benito a considerar la Cruz como una señal bienhechora que simboliza la pasión salvadora de Cristo, por la cual fue vencido el poder del mal y de la muerte.
LA MEDALLA
No cabe duda que la medalla-cruz de San Benito es una de las más apreciadas por los cristianos. A ella se le atribuyen poder y remedio, ya sea contra ciertas enfermedades de hombre y animales, ya contra los males que pueden afectar al espíritu, como las tentaciones del poder del Mal. Es frecuente también colocarla en los cimientos de nuevos edificios como garantía de seguridad y bienestar de sus habitantes.
El origen de esta medalla se fundamenta en una verdad y experiencia del todo espiritual que aparece en la vida de san Benito, tal como nos la describe el papa san Gregorio en el Libro II de los Diálogos. El Padre de los monjes usó con frecuencia del signo de la cruz como signo de salvación, de verdad, y purificación de los sentidos. San Benito quebró el vaso que contenía veneno con la sola señal de la cruz hecha sobre él. Cuando los monjes fueron perturbados por el maligno, el santo manda que hagan la señal de la cruz sobre sus corazones. Una cruz era la firma de los monjes en la carta de su profesión cuando no sabían escribir. Todo ello no hace más que invitar a sus discípulos a considerar la santa cruz como señal bienhechora que simboliza la pasión salvadora del Señor, por la que se venció el poder del mal y de la muerte.
LA MEDALLA COMO HOY LA CONOCEMOS
La medalla tal como hoy la conocemos, se puede remontar al siglo XII o XIV o quizá a época anterior y tiene su historia. En el siglo XVII, en Nattenberg de Baviera, en un proceso contra unas mujeres acusadas de brujería, ellas reconocieron que nunca habían podido influir malignamente contra el monasterio benedictino de Metten porque estaba protegido por una cruz. Hechas, con curiosidad, investigaciones sobre esa cruz, se encontró que en las tapias del monasterio se hallaban pintadas varias cruces con unas siglas misteriores que no supieron descifrar. Continuando la investigación entre los códices de la antigua biblioteca del monasterio, se encontró la clave de las misteriosas siglas en un libro miniado del siglo XIV. En efecto, entre las figuras aparece una de san Benito alzando en su mano derecha una cruz que contenía parte del texto que se encontraba sólo en sus letras iniciales en las astras cruzadas de las cruces pintadas en las tapias del monasterio de Metten, y en la izquierda portaba una banderola con la continuación del texto que completaba todas las siglas hasta aquel momento misteriosas.
Mucho más tarde, ya en el siglo XX, se encontró otro dibujo en un manuscrito del monasterio de Wolfenbüttel representando a un monje que se defiende del mal, simbolizado en una mujer con una copa llena de todas las seducciones del mundo. El monje levanta contra ella una cruz que contiene la parte final del texto consabido. Es posible que la existencia de tal creencia religiosa no sea fruto del siglo XIV sino muy anterior.
APROBACION DE LA IGLESIA COMO SIMBOLO CRISTIANO
Benedicto XIV, en marzo de 1742, aprobó el uso de la medalla que había sido tachada anteriormente, por algunos, de superstición, y mandó que la oración usada para bendecirla se incorporase al Ritual Romano. Dom Gueranger, liturgista y fundador de la Concregación Benedictina de Solesmes, comentó que el hecho de aparecer la figura de san Benito con la santa Cruz, confirma la fuerza que su signo obtuvo en sus manos. La devoción de los fieles y las muchas gracias obtenidas por ella es la mejor muestra de su auténtico valor cristiano.
LOS SIMBOLOS DE LA MEDALLA - CRUZ DE SAN BENITO
La medalla presenta, por un lado, la imagen del Santo Patriarca, y por el otro, una cruz, y en ella y a su alrededor, las letras iniciales de una oración o exorcismo, que dice así (en latín y en castellano):
Crux Sancti Patris Benedicti
Cruz del Santo Padre Benito
Crux Sacra Sit Mihi Lux
Mi luz sea la cruz santa
Non Draco Sit Mihi Dux
No sea el demonio mi guía
Vade Retro Satana
¡Apártate, Satanás!
Numquam Suade Mibi Vana
No sugieras cosas vanas
Sunt Mala Quae Libas
Pues maldad es lo que brindas
Ipse Venena Bibas
Bebe tú mismo el veneno.
Como se puede apreciar por las iniciales distribuidas en la cruz, a ésta el texto de la plegaria la acompaña siempre, y a la vez es una ayuda para la recitación de la misma. El texto latino se compone -después del título: Crux Sancti Patris Benedicti (C.S.P.B.) – de tres dísticos, que encierran una invocación a la Santa Cruz, con el deseo suplicante de tenerla como guía y apoyo, y la expresión del rechazo a Satanás, a quien se manda que se aparte – con las palabras de Jesús, cuando fue tentado por él (Mt. 4,10) -, manifestando que no va a escuchar sus sugerencias, pues es malo lo que ofrece. Es una auténtica confesión de fe y de; amor a Cristo, y una renuncia al diablo.
INDULGENCIAS
El 12 de marzo de 1742 Benedicto XIV otorgó indulgencia plenaria a la medalla de San Benito si la persona cumple las siguientes condiciones:
Si realiza el Sacramento de la Reconciliación, recibe la Eucaristía, ora por el Santo Padre en las grandes fiestas y durante esa semana reza el santo rosario, visita a los enfermos, ayuda a los pobres, enseña la Fe Cristina o participa en la Santa Misa.
Las grandes fiestas de las que se habla arriba son: Navidad, Epifanía, Pascua de Resurrección, Ascensión, Pentecostés, la Santísima Trinidad, Corpus Christi, La Asunción, La Inmaculada Concepción, el nacimiento de María, todos los Santos y fiesta de San Benito.
Quienes lleven la medalla de San Benito a la hora de la muerte serán protegidos siempre que se encomienden al Padre, se confiesen y reciban la comunión o al menos invoquen el nombre de Jesús con profundo arrepentimiento.
UN SIGNO SAGRADO
Desde hace muchos siglos, la cruz y la medalla de San Benito han sido muy difundidas aun más allá de los círculos más comprometidos con la fe de la Iglesia. La medalla de San Benito es un sacramental reconocido por la Iglesia con gran poder de exorcismo. Como todo sacramental, su poder está no en sí misma sino en Cristo, quien lo otorga y en la fe y la fervorosa disposición de quien usa la medalla.
Además, quienes a la hora de la muerte lleven la medalla de San Benito o el crucifijo con esta última, serán protegidos siempre que se encomienden al Padre, se confiesen y reciban la comunión o al menos invoquen el nombre de Jesús con profundo arrepentimiento. El Crucifijo de la Buena Muerte y la Medalla de San Benito han sido reconocidos por la Iglesia como una ayuda para el cristiano frente a la tentación, el peligro, el mal, y principalmente en la hora de la muerte, y la misma Iglesia le ha conferido también al Crucifijo con la Medalla la Indulgencia Plenaria. Esta cruz también ayuda a los enfermos para unir sus sufrimientos a los de Nuestro Salvador.
ORACION A SAN BENITO
Señor Dios Nuestro, que hiciste al abad Benito,
esclarecido maestro del Divino Servicio, concédeme por su intercesión
la gracia que te pido. También te pido, que prefiriéndote a a ti sobre
todos los lujos, avancemos por la senda de tus mandamientos con el
corazón contrito, y rezando y trabajando con amor como él hizo.
Por Cristo Nuestro Señor. Amén.
La fecha de San Benito es el 21 de marzo, pero por ser período de cuaresma se festeja el día 11 de Julio
Es el patrono de los monjes y los exorcistas.
http://www.wikipedia.com
http://www.arcangelrafael.com.ar/obenito.html
http://eltemplodelaluzinterior.wordpress.com/2008/10/28/milagros-de-la-medalla-de-san-benito/
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