Asumiendo MI latinoamericidad QUE NUNCA NEGUE TRAS FALSAS POSTURAS ORIENTALES QUE NI GENETICA NI FISICAMENTE ME ERAN POSIBLES COPIO ESTE LLAMADO

PLEGARIA HEROICA. VIDA, SALUD, LUCHA Y SACRIFICIO.

NO ES EL GUERRERO COMPETITIVO QUE CON DOLOR HE OBSERVADO EN LOS GRUPOS QUE CONOZCO QUE PRETENDEN SEGUIR LA CULTURA ARIA Y QUE YA SE DIVIDEN DESDE EL COMIENZO, COMO HE VISTO EN VALENCIA, DESDE SU FUNDACION, O COMPITEN ENTRE ELLOS PARA VER QUIEN OSTENTA EL PODER O RECIBE LA INFORMACION PRIMERO O MANIPULA A FIGURAS EN MORTAL DOBLE MORAL...ESO NO ES LA HERENCIA DE LA SANGRE ES SEGUIR SIENDO POBRES CRIATURAS HUMANAS QUE NO SALEN DE SU LABERINTO, PORQUE NO TIENEN RAICES DE QUE SUSTENTARSE

¿QUE LLAMADO DE LA SANGRE SE MENCIONA SI NO HAY PRINCIPIOS NI BASES SOBRE LAS CUALES SUSTENTAR ESE SUPUESTO PACTO SANGRE QUE NO ES MAS QUE MASCARA DEL EGO, QUE JUEGA CON UN NUEVO CONOCIMIENTO SI NI SIQUIERA SE CONOCE LA BASICA HISTORIA DE BACHILLERATO QUE PREPARABA PARA ESTE SALTO CUANTICO Y NO PARA RETROCEDER A VIEJOS PARADIGMAS QUE YA NO FUNCIONAN NI POR EPOCA NI POR SER AMERICA ESO A LO QUE QUIEREN REDUCIRLA LOS IGNORANTES DE LA VERDADERA CONDUCTA QUE IMPRIME EL ORIGEN SI NI SIQUIERA CONOCEN QUIENES SON AHORA, SOBERBIOS ALGUNOS, IGNORANTES OTROS?

"La tierra es el lugar elegido por las almas más nobles

La tierra es el heroico campo de batalla de los espíritus…

El yunque donde el Herrero celeste fragua sus obras”

Aurobindo, Savitri, XI,I

“Por lo tanto ¡oh Arjuna, levántate y pelea con determinación!” Sri Krisnha en el Bhagavat Gita. Vr 37 Cat 2.

Vivir significa luchar, no lo podemos negar. Nos enfrentamos a este principio de manera inexorable y dura: como una orden militar, breve y concisa, a la cual nadie que aspire al heroísmo puede escapar. O se acepta esa orden, cumpliéndola del mejor modo posible, o de una manera lamentable, infame y cobarde se deserta y sucumbe ante las potencias de la Ignorancia que rigen este mundo y se es su esclavo…. No hay otra alternativa.

Vivir significa luchar. Esta orden que la Providencia nos ha dado, distingue al Señor del ciego esclavo, al héroe del cobarde, al hombre de acción del seductor y charlatán, al carácter fuerte y la determinación firme de la debilidad y la ambivalencia, finalmente define lo bueno y lo malo que nos sucede, lo justo y lo injusto, y nos permite además valorar nuestro diario trabajo.

Es la Fuerza de la vida que, más allá del carácter trágico y horrible que pueda mostrarnos en la guerra, se impone a todos los mezquinos deseos personales, debilidades y temores. Dios solo ayuda al valiente y esforzado. Solo el que lucha puede triunfar, gozar y comprender, vestirse de victoria y entrar en el templo de la Gloria. Mas el haragán dulzón y blandito que rehúye el compromiso, el esfuerzo y la lucha desconoce la fuerza y potencia del espíritu, el brío y la violencia divinas. No captara nunca la feliz corriente de dominio y soberanía que la Providencia dispensa al guerrero cuando este se prepara y se ofrece para una Causa digna, grande y justa.

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