Comisión del concejo acudió a las oficinas en la casa Guipuzcoana
Ausencia de Asdrúbal González no permitió hacer notificación de su destitución
como cronista
15/04/2014
PUERTO CABELLO, (Prensa Alcaldía).- Ante la destitución efectuada ayer por el Concejo Municipal de Asdrúbal González como cronista de la ciudad, una comisión del ente edilicio acudió a las oficinas correspondientes al cargo ubicadas en la casa Guipuzcoana, donde no fue posible efectuar la notificación de destitución debido a que el González no se encontraba.
Así lo informó Dina Castillo, concejal y miembro del área de cultura, quien destacó que se notó ausencia cuando se trataba de horario laboral.
Así lo informó Dina Castillo, concejal y miembro del área de cultura, quien destacó que se notó ausencia cuando se trataba de horario laboral.
“Fuimos designados para acompañar al secretario del Concejo Municipal quien realizaría la notificación de destitución del ciudadano Asdrúbal González, pero la sorpresa es que no se encontraba, por lo cual no se procedió ya que la notificación debe hacerse de forma personal”, destacó Castillo.
Además, informó que se dejó constancia del cómo se encontraba la oficina y los bienes de la misma, notando escombros y algunas ruinas, además de un monitor de computadora pero no así el CPU, lo que hace presumir según su apreciación, que puedan haberse llevado alguna información.
“Dejamos constancia ante la presencia de la notaria pública 1ero. Es de recordar que González no estaba cumpliendo con las funciones inherentes a su cargo, las cuales se contemplan en la ordenanza del cronista, específicamente en el artículo número 7, por lo cual la cámara municipal exigió a la Sindicatura Municipal que iniciara el procedimiento respectivo tal y como lo establece la ordenanza”, afirmó.
La comisión asistente estuvo integrada por los concejales Marlene de Saavedra, Remigio Hermoso, el secretario Gustavo Marval y Nelson Vielma, designado cronista interino y que ejercerá funciones mientras se nombra al cronista titular
El Carabobeño 13 octubre 2012
Casa Guipuzcoana de Puerto Cabello bajo restauración
La fachada fue remozada recientemente. (Foto José López)
María López Rodríguez | mlopez@el-carabobeno.com
Tras estar sumida en el más absoluto abandono por años, en la actualidad la hermosa casona conocida como la “Casa Guipuzcoana” es objeto de una profunda y minuciosa restauración a cargo de expertos en la materia, quienes en equipo y con mano de obra del municipio Puerto Cabello, laboran para devolverle su belleza de antaño, para el disfrute de propios y visitantes.
Los costosos trabajos -no precisaron monto- pues aún queda mucho por hacer, fueron asumidos por el Instituto Nacional de los Espacios Acuáticos (INEA), a cargo del vicealmirante Jorge Sierraalta Zavarce, quien también ocupó el cargo como coordinador del puerto de Puerto Cabello. El grupo de especialistas quienes han asumido dicha responsabilidad está encabezado por los arquitectos Mario Sardi y Ángel Encinoza.
Esta infraestructura ubicada en el casco colonial de la jurisdicción fue residencia de vascos quienes ejercían un monopolio en materia económica para la época. Fue construida en el año 1730, por tal razón es considerada como patrimonio cultural de Venezuela. Fue declarada Monumento Histórico Nacional el 11 de julio de 1978.
La edificación meses atrás enfrentaba graves problemas de humedad en todos sus rincones, deterioro de sistema eléctrico, tuberías de aguas, pisos, ventanas, paredes, techo, daños que fueron denunciados en más de una oportunidad a través de este rotativo.
Sardi explicó que las labores iniciaron con la parte de servicios que se encontraban en muy mal estado, donde se replanteó toda la parte sanitaria y eléctrica, así como detección de incendios, con el cambio de tableros y sub tableros que se encontraban totalmente oxidados. “La idea es actualizar y modernizar la casa sin alterar su historia”.
“Hemos poco a poco resaneado las paredes, los marcos de puertas y ventanas donde los daños eran muy severos. Casi dos mil tejas han sido removidas y restauradas en lo que se refiere al techo. Hay mano de obra calificada, que se ha ocupado por años de la rehabilitación de muchas casas antiguas y posadas de la zona”, enfatizó el arquitecto en la entrevista concedida a El Carabobeño.
Los trabajos, que confesaron tienen su dificultad se han visto afectados por la humedad y agua que viene del piso por el nivel freático, situación que están atacando y solventando, acotó Encinoza.
La ciudad de Puerto Cabello fue fundada un 5 de agosto del año 1811, y tiene grabada en las páginas de su historia costumbres y tradiciones centenarias muy arraigadas en su seno, acompañados de hermosos parajes turísticos que hace de la ciudad un sitio de parada obligatoria del estado Carabobo. Pero sin duda alguna que el valor más importante de esta localidad es su gente.
En octubre de 2010, el cronista dijo que inicialmente la recuperación total de la casona estaba valorada en 5 millones de bolívares fuertes. En esa ocasión la estatal Bolivariana de Puertos S.A. (BoliPuertos) había ejecutado algunas mejoras.
González trajo a su memoria que la Casa Guipuzcoana, no es el único sitio de importancia en la ciudad que merece atención y que se le extienda una mano amiga, pues la denominada Casa del Correo, como muchos otros sitios emblemáticos de Puerto Cabello, también está en pésimo estado.
La estructura
La hermosa Casa Guipuzcoana, pueden ubicarla de manera estratégica en el casco colonial de la ciudad, resguardada de manera silenciosa y apacible por un cóndor conocido como águila. Se ignora quién fue su arquitecto, aunque al parecer la construcción se realizó bajo la dirección de Pedro José de Olavarriega y del ingeniero militar Juan Gayanzo Láscari. En el año 1978 el arquitecto Andrés Norgard realizó una remodelación y rehabilitó su interior.
Su diseño está influenciado por la arquitectura vasca, con características sencillas. Las paredes están hechas en mampostería de piedra coralina, el techo es de teja criolla de arcilla a cuatro aguas, y reposa sobre estructura de madera de pares y nudillos.
Desde 1981 hasta la fecha la Casa Guipuzcoana pasó a ser la biblioteca principal del municipio, gracias al esfuerzo y dedicación de don Miguel Elías Dao, quien para aquel entonces era el cronista de la ciudad. En sus espacios hay una escultura del referido periodista e historiador elaborada por el arquitecto Briceño Andrade. Por la humedad muchos libros se han deteriorado y han sido desincorporados.
Las Cuatro Estaciones
El arquitecto Ángel Encinoza, agregó que también se están encargando del proyecto de restauración y posterior puesta en funcionamiento de las esculturas denominadas “Las Cuatro Estaciones”, por sus nombres Primavera, Invierno, Verano y Otoño, localizadas justo al frente de la Casa Guipuzcoana. El historiador y cronista de la ciudad, Asdrúbal González detalló que las mismas fueron objeto de unas notables mejoras a cargo del maestro escultor Julio César Briceño Andrade, quien en otras ocasiones las ha restaurado de severos daños. “No son trabajos simples de pintura, son labores minuciosas”, aclaró. “Partiendo de la misma esencia, queremos ponerlas como eran originalmente rodeadas de un ornato indicado y como fuentes, cuya agua salía de las máscaras de los sátiros. Hacen falta detalles por revivir, pero vamos avanzando”, concluyó Encinoza.
Deseo de los porteños
A principios del año 2011 el entonces presidente de la Fundación Cultural Juan Antonio Segrestáa, Orlando Rivas, anunció que solicitarían a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), que el casco colonial de la ciudad sea protegido como Patrimonio Histórico de la Humanidad. La iniciativa pretende conservar en el tiempo la belleza de los sitios emblemáticos e históricos del municipio Puerto Cabello y evitar que sus daños se tornen irreversibles con el tiempo.
Porteños, visitantes y el cronista de la ciudad, Asdrúbal González, ante la indiferencia de los Gobiernos Regional y Municipal extendieron un llamado a las empresas públicas y privadas, además de las estatales como Pequiven y Pdvsa Refinería El Palito a colaborar con el mantenimiento de la ciudad. Destacó que importantes inversiones no se llevan a cabo por la falta de recursos. Puso como ejemplo que en una oportunidad el Banco Caribe hizo su aporte con la lámpara y el aire acondicionado del Teatro Municipal, que también está siendo remozado.
Abandono
La Plaza El Águila o El Cóndor, las casonas del Casco Colonia de la ciudad, El Ateneo, El Café París, la Casa del Correo, Catedral San José, la Iglesia Nuestra Señora del Rosario, Museo Casa de la Diversidad, así como otras estructuras coloniales están en el más completo abandono. El cronista del municipio reiteró que la Zona Colonial está sumida en el “colmo” de los abandonos y fustigó a la municipalidad que tras más de tres años de gestión no haya hecho nada por estos espacios.
Promesa incumplida
Asdrúbal González recordó la promesa que a principios de enero del año 2009, cuando falleció el eterno cronista de Puerto Cabello, Don Miguel Elías Dao, sobre su féretro hicieron el alcalde de la ciudad Rafael Lacava y el gobernador Henrique Fernando Salas, quienes se comprometieron, en conjunto, a construir la Biblioteca “Miguel Elías Dao”, y así sacarla de la Casa Guipuzcoana. “No es un reclamo, sólo les recuerdo a ambos lo prometido”, aclaró
Notitarde 24/04/2014
Aseveró que la Casa Guipuzcoana se encuentra en buen estado
González asegura que sigue siendo el cronista del municipio porteño
- Asdrúbal González. (Foto: Luis Ceballos. / )
Puerto Cabello, abril 23 (Oglis Clisánchez Andrades).- Asdrúbal González aseguró que “la sentencia de brazos alzados del Concejo Municipal” no es más que la primera instancia de un proceso que tiene tribunales donde continuar. Sostuvo que hasta que exista una sentencia definitivamente firme, “continúo como cronista (…) y con la frente en alto por no haberme doblegado”.
Respondió a lo dicho por ediles de la Cámara Municipal, quienes pidieron que se le investigue manifestando que los registros históricos se encuentran en abandono. González enfatizó que los archivos permanecen en buen estado. Contó que durante cuatro años solicitaron al Alcalde y al Concejo, por escrito y en forma de derecho de palabra, la dotación de un archivero y que además solo durante tres meses se le pagó a una persona especializada “que por el mal sueldo se fue”. A pesar de esto, subrayó que los archivos de Puerto Cabello se encuentran en condiciones adecuadas, “se desincorporó la parte correspondiente a los matrimonios mediante un procedimiento legal; los archivos más importantes, que son los de la historia de la ciudad, están a buen recaudo”.
El doctor Asdrúbal González hizo referencia a la declaración de la concejal Marleni de Saavedra, “dice que es triste ver el desastre en que se encuentra un lugar tan importante, respondo: Marleni de Saavedra, miembro del Psuv, acusa a su jefe máximo en Carabobo, el gobernador Francisco Ameliach, y en el intermedio a la Directora de Cultura de mantener la casa en mal estado, porque ignora la profesora Saavedra que corresponde a la Red de Bibliotecas Públicas del estado Carabobo el mantenimiento de la Casa Guipuzcoana”.
Tras aclarar que el mantenimiento es competencia del Ejecutivo regional, González explica que esa dependencia gubernamental sí cumple con el trabajo que le corresponde. “Sí se hace cargo (...) Está en buen estado (la Casa Guipuzcoana). La Gobernación sí está haciendo el trabajo, están acusando a la Gobernación de no cumplir, lo cual es una mentira”.
González citó también lo mencionado por el concejal Remigio Hermoso, quien manifestó que le sorprendió ver que prácticamente no hay archivos y que las fotografías y cuadros apilados demuestran descuido. “Los cuadros apilados los encontré en este estado al llegar (...) No fueron colocados en la Casa Guipuzcoana porque la ley prohíbe que en un monumento histórico se ocupen sus paredes”.
De igual forma, respondió a Nelson Vielma, quien fue designado cronista interino. “No es concebible que un hombre de su cultura ignore que la sentencia de brazos alzados del Concejo Municipal porteño no es más que la primera instancia de un proceso que tiene tribunales donde continuar”.
Asdrúbal González dijo que encontró la Casa Guipuzcoana prácticamente en el suelo y que ésta fue restaurada gracias al apoyo del vicealmirante Jorge Sierraalta, quien estando en Bolipuertos y luego en el Inea, contribuyó a través de dichas instituciones para la restauración.
Por otro lado, contó que se les privó de viáticos para asistir a las dos últimas convenciones de cronistas; que se les retuvo el sueldo en tres oportunidades, al igual que el bono navideño del año 2012. “Para abrir la oficina de cronista la Alcaldía solo envió tres escritorios de los cinco solicitados, con tres sillas ejecutivas y tres más para visitas. El aire acondicionado lo donó Bolipuertos, las lámparas del techo fueron regaladas por José M. Rodríguez, Gautemoc García, Arturo Polanco y Leopoldo Henríquez. Una mesa y seis sillas siglo XV las restauró el Inea, los cuadros de Simón Bolívar, Francisco de Miranda, Bartolomé Salom y Juan José Flores fueron restaurados con dinero de su peculio particular por el artista plástico Fernando Henríquez. La computadora la regaló Antonio Saraullo. Desde hace 27 meses fue eliminado el cargo de secretaria del cronista (...) Durante el mismo lapso se nos privó de todo el material de oficina, ni una hoja de papel, ni un lápiz, ni una botella de agua se ha recibido en más de dos años por parte de la Alcaldía”.
Respondió a lo dicho por ediles de la Cámara Municipal, quienes pidieron que se le investigue manifestando que los registros históricos se encuentran en abandono. González enfatizó que los archivos permanecen en buen estado. Contó que durante cuatro años solicitaron al Alcalde y al Concejo, por escrito y en forma de derecho de palabra, la dotación de un archivero y que además solo durante tres meses se le pagó a una persona especializada “que por el mal sueldo se fue”. A pesar de esto, subrayó que los archivos de Puerto Cabello se encuentran en condiciones adecuadas, “se desincorporó la parte correspondiente a los matrimonios mediante un procedimiento legal; los archivos más importantes, que son los de la historia de la ciudad, están a buen recaudo”.
El doctor Asdrúbal González hizo referencia a la declaración de la concejal Marleni de Saavedra, “dice que es triste ver el desastre en que se encuentra un lugar tan importante, respondo: Marleni de Saavedra, miembro del Psuv, acusa a su jefe máximo en Carabobo, el gobernador Francisco Ameliach, y en el intermedio a la Directora de Cultura de mantener la casa en mal estado, porque ignora la profesora Saavedra que corresponde a la Red de Bibliotecas Públicas del estado Carabobo el mantenimiento de la Casa Guipuzcoana”.
Tras aclarar que el mantenimiento es competencia del Ejecutivo regional, González explica que esa dependencia gubernamental sí cumple con el trabajo que le corresponde. “Sí se hace cargo (...) Está en buen estado (la Casa Guipuzcoana). La Gobernación sí está haciendo el trabajo, están acusando a la Gobernación de no cumplir, lo cual es una mentira”.
González citó también lo mencionado por el concejal Remigio Hermoso, quien manifestó que le sorprendió ver que prácticamente no hay archivos y que las fotografías y cuadros apilados demuestran descuido. “Los cuadros apilados los encontré en este estado al llegar (...) No fueron colocados en la Casa Guipuzcoana porque la ley prohíbe que en un monumento histórico se ocupen sus paredes”.
De igual forma, respondió a Nelson Vielma, quien fue designado cronista interino. “No es concebible que un hombre de su cultura ignore que la sentencia de brazos alzados del Concejo Municipal porteño no es más que la primera instancia de un proceso que tiene tribunales donde continuar”.
Asdrúbal González dijo que encontró la Casa Guipuzcoana prácticamente en el suelo y que ésta fue restaurada gracias al apoyo del vicealmirante Jorge Sierraalta, quien estando en Bolipuertos y luego en el Inea, contribuyó a través de dichas instituciones para la restauración.
Por otro lado, contó que se les privó de viáticos para asistir a las dos últimas convenciones de cronistas; que se les retuvo el sueldo en tres oportunidades, al igual que el bono navideño del año 2012. “Para abrir la oficina de cronista la Alcaldía solo envió tres escritorios de los cinco solicitados, con tres sillas ejecutivas y tres más para visitas. El aire acondicionado lo donó Bolipuertos, las lámparas del techo fueron regaladas por José M. Rodríguez, Gautemoc García, Arturo Polanco y Leopoldo Henríquez. Una mesa y seis sillas siglo XV las restauró el Inea, los cuadros de Simón Bolívar, Francisco de Miranda, Bartolomé Salom y Juan José Flores fueron restaurados con dinero de su peculio particular por el artista plástico Fernando Henríquez. La computadora la regaló Antonio Saraullo. Desde hace 27 meses fue eliminado el cargo de secretaria del cronista (...) Durante el mismo lapso se nos privó de todo el material de oficina, ni una hoja de papel, ni un lápiz, ni una botella de agua se ha recibido en más de dos años por parte de la Alcaldía”.
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