La noche de ayer en la Catedral de Valencia
Del Prette realizó la Vigilia de Resurrección del Señor
- Monseñor Reinaldo Del Prette, arzobipso de Valencia, realizó la bendición del agua ante decenas de feligreses anoche en la Catedral. (Notitarde / Jennifer Anais Infante)
Valencia, abril 19 (Ukrania Sánchez Celis).- El Arzobispo de Valencia, monseñor Reinaldo Del Prette, celebró este sábado la solemne vigilia pascual en la Catedral de Valencia, que inició con la bendición del nuevo fuego, en la puerta de los hierros, en la entrada principal de la iglesia.
Esta conmemoración dio inicio a las 7:00 de la noche con cantos cristianos, seguido de la liturgia de la palabra, con la promesa del compromiso bautismal de un adulto, un niño y una niña, así como también la acostumbrada eucaristía. Las campanas de la iglesia fueron sonadas durante la vigilia, las cuales habían permanecido en silencio desde el inicio de la Semana Santa, lo que indica la resurrección de Cristo.
Siendo ésta, la noche más “santa” según los feligreses porque es la fiesta más importante del año litúrgico, la iglesia es acompañada de alegría, del fuego, de la luz nueva, el agua de la vida nueva, la palabra, la eucaristía, el pregón pascual y todo aquello que permita alabar a Jesús.
La primera parte de la vigila, celebra a Cristo, simbolizando en el cirio pascual la imagen de Cristo resucitado, se presentó el fuego nuevo, signo de la presencia de Dios y expresión de luz, fuerza y vida. La segunda parte, representó la bendición del fuego, se llevó el cirio ante el celebrante que con un estilete que marca una cruz sobre éste, se fijó en el cirio cinco granos de incienso. Seguidamente la procesión protagoniza la ceremonia donde Jesucristo procede como luz de guía, símbolo de Cristo resucitado.
Cuando culminó la lectura de la palabra, monseñor Del Prette se dirigió ante sus feligreses, destacando la importancia que tiene entrar al templo de Dios con las luces apagadas, y motivar la luz con cada uno de los asistentes. De este modo, destacó que “la cruz representa la quiebra de toda tiniebla y pecados, que esa luz viva para todos los Venezolanos”.
Al finalizar el acto, Del Prette procedió a la bendición del agua bautismal, siendo la marca del que había creído y cambiado por Jesús, se acercó a los católicos presentes, quienes portaban velas y envases con agua, para recibir la bendición de Dios.
La misa de la vigilia pascual, aunque se celebra antes de la media noche, es ya la misa pascual del domingo de resurrección, en la cual se relató cómo el Señor salvó a su pueblo y envió a su hijo para rendirnos.
Esta conmemoración dio inicio a las 7:00 de la noche con cantos cristianos, seguido de la liturgia de la palabra, con la promesa del compromiso bautismal de un adulto, un niño y una niña, así como también la acostumbrada eucaristía. Las campanas de la iglesia fueron sonadas durante la vigilia, las cuales habían permanecido en silencio desde el inicio de la Semana Santa, lo que indica la resurrección de Cristo.
Siendo ésta, la noche más “santa” según los feligreses porque es la fiesta más importante del año litúrgico, la iglesia es acompañada de alegría, del fuego, de la luz nueva, el agua de la vida nueva, la palabra, la eucaristía, el pregón pascual y todo aquello que permita alabar a Jesús.
La primera parte de la vigila, celebra a Cristo, simbolizando en el cirio pascual la imagen de Cristo resucitado, se presentó el fuego nuevo, signo de la presencia de Dios y expresión de luz, fuerza y vida. La segunda parte, representó la bendición del fuego, se llevó el cirio ante el celebrante que con un estilete que marca una cruz sobre éste, se fijó en el cirio cinco granos de incienso. Seguidamente la procesión protagoniza la ceremonia donde Jesucristo procede como luz de guía, símbolo de Cristo resucitado.
Cuando culminó la lectura de la palabra, monseñor Del Prette se dirigió ante sus feligreses, destacando la importancia que tiene entrar al templo de Dios con las luces apagadas, y motivar la luz con cada uno de los asistentes. De este modo, destacó que “la cruz representa la quiebra de toda tiniebla y pecados, que esa luz viva para todos los Venezolanos”.
Al finalizar el acto, Del Prette procedió a la bendición del agua bautismal, siendo la marca del que había creído y cambiado por Jesús, se acercó a los católicos presentes, quienes portaban velas y envases con agua, para recibir la bendición de Dios.
La misa de la vigilia pascual, aunque se celebra antes de la media noche, es ya la misa pascual del domingo de resurrección, en la cual se relató cómo el Señor salvó a su pueblo y envió a su hijo para rendirnos.
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