Sugieren invitar a la ONU a la Comisión de la Verdad
Ortega y Peraza rechazan que diputados investiguen hechos
Ortega: Comisión por la Verdad no es para venganzas NICOLA ROCCO
JUAN FRANCISCO ALONSO
| EL UNIVERSAL
sábado 12 de abril de 2014 12:00 AM
"No se puede ser juez y
parte". Este axioma no puede desecharse a la hora de conformar una
Comisión de la Verdad para investigar los hechos de violencia
registrados en el país en las últimas ocho semanas y, por ello, expertos
en Derechos Humanos recomendaron que se modifique la instancia
designada por la Asamblea Nacional.
"Una Comisión por la Verdad no puede ser un instrumento de venganza ni para ahondar en la polarización", afirmó directora Ejecutiva del Comité de Familiares de Víctimas de los sucesos de febrero y marzo de 1989 (Cofavic), Liliana Ortega, quien agregó: "Lo primero es que los miembros de la Comisión deben ser personas ajenas al conflicto y por ello somos partidarios de que se invite a las Naciones Unidas a participar, pues ella tiene mucha experiencia en este tipo de instancias".
En similares términos se pronunció el profesor de Derecho Constitucional, Arturo Peraza s.j, quien aseveró: "Una Comisión de la Verdad requiere de personas independientes y confiables, dentro o fuera del país, porque aunque una Comisión de esta naturaleza no sustituye a la Fiscalía ni a los tribunales ejerce funciones de investigación similares y por lo tanto su actuación debe ser igual de imparcial y objetiva".
Para el jurista la instancia nombrada en la Asamblea Nacional semanas atrás no se puede calificar de Comisión de la Verdad, sino de parlamentaria.
"Las comisiones de la Verdad están formadas por personas que no están muy contaminadas políticamente por el conflicto que van a analizar. Un diputado está muy contaminado políticamente y una Comisión en la que hay una correlación 6 a 4 diputados, sin importar qué bando tiene 6 y cuál 4, no generará confianza en los resultados de las investigaciones".
Objeciones similares se escucharon durante la primera reunión que representantes del Gobierno y de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) sostuvieron entre la noche del jueves y madrugada de ayer en el Palacio de Miraflores.
"A nosotros nos interesa la verdad, pero no la verdad oficial, la verdad verdadera, por eso planteamos una Comisión de la Verdad que no sea controlada por la mayoría oficialista, que sea equilibrada para castigar, cuando se demuestren responsabilidades, a todo aquel que surja como responsable de la violencia, sea de un lado o del otro lado", afirmó el diputado Omar Barboza (UNT).
Gente hay
Consultado si en el país hay gente capacitada para integrar una instancia de esta naturaleza, Pereza asintió sin dudarlo un instante.
"Hay activistas de organizaciones no gubernamentales de larga trayectoria en el país que vienen trabajando el tema de Derechos Humanos. Asimismo contamos con juristas como Carlos Ayala Corao (expresidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos) y Pedro Nikken (expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos), los cuales han participado en comisiones de investigación de este tipo en Centroamérica o saben cómo deben operar las mismas", afirmó.
Por último, Ortega recordó que instancias de este tipo deben tener un mandato específico que les permita generar unos resultados (esclarecer los hechos, señalar a los culpables y formular recomendaciones para evitar que vuelvan a ocurrir los hechos).
jalonso@eluniversal.com
"Una Comisión por la Verdad no puede ser un instrumento de venganza ni para ahondar en la polarización", afirmó directora Ejecutiva del Comité de Familiares de Víctimas de los sucesos de febrero y marzo de 1989 (Cofavic), Liliana Ortega, quien agregó: "Lo primero es que los miembros de la Comisión deben ser personas ajenas al conflicto y por ello somos partidarios de que se invite a las Naciones Unidas a participar, pues ella tiene mucha experiencia en este tipo de instancias".
En similares términos se pronunció el profesor de Derecho Constitucional, Arturo Peraza s.j, quien aseveró: "Una Comisión de la Verdad requiere de personas independientes y confiables, dentro o fuera del país, porque aunque una Comisión de esta naturaleza no sustituye a la Fiscalía ni a los tribunales ejerce funciones de investigación similares y por lo tanto su actuación debe ser igual de imparcial y objetiva".
Para el jurista la instancia nombrada en la Asamblea Nacional semanas atrás no se puede calificar de Comisión de la Verdad, sino de parlamentaria.
"Las comisiones de la Verdad están formadas por personas que no están muy contaminadas políticamente por el conflicto que van a analizar. Un diputado está muy contaminado políticamente y una Comisión en la que hay una correlación 6 a 4 diputados, sin importar qué bando tiene 6 y cuál 4, no generará confianza en los resultados de las investigaciones".
Objeciones similares se escucharon durante la primera reunión que representantes del Gobierno y de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) sostuvieron entre la noche del jueves y madrugada de ayer en el Palacio de Miraflores.
"A nosotros nos interesa la verdad, pero no la verdad oficial, la verdad verdadera, por eso planteamos una Comisión de la Verdad que no sea controlada por la mayoría oficialista, que sea equilibrada para castigar, cuando se demuestren responsabilidades, a todo aquel que surja como responsable de la violencia, sea de un lado o del otro lado", afirmó el diputado Omar Barboza (UNT).
Gente hay
Consultado si en el país hay gente capacitada para integrar una instancia de esta naturaleza, Pereza asintió sin dudarlo un instante.
"Hay activistas de organizaciones no gubernamentales de larga trayectoria en el país que vienen trabajando el tema de Derechos Humanos. Asimismo contamos con juristas como Carlos Ayala Corao (expresidente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos) y Pedro Nikken (expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos), los cuales han participado en comisiones de investigación de este tipo en Centroamérica o saben cómo deben operar las mismas", afirmó.
Por último, Ortega recordó que instancias de este tipo deben tener un mandato específico que les permita generar unos resultados (esclarecer los hechos, señalar a los culpables y formular recomendaciones para evitar que vuelvan a ocurrir los hechos).
jalonso@eluniversal.com
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