domingo, 13 de abril de 2014
Se eclipsa la Luna de Cristo en la Cruz
Tomado del blog "Termómetro Zodiacal" de Pedro González Silva
Las señales del cielo pueden ser
sobrecogedoras y señalan que tiempos muy especiales están por venir para la
humanidad; tiempos de inicio, de volver a empezar, tiempos marcados por una
nueva era que se vislumbra: la Cruz Cósmica ha comenzado a activarse en los
signos cardinales del zodíaco; Aries, Cáncer, Libra y Capricornio, que son los
signos de los comienzos de ciclo, y por tanto esta cruz nos habla del parto de
una nueva gran etapa de la cual seremos testigos y protagonistas.
La Cruz Cósmica formada por Plutón en
Capricornio, Júpiter en Cáncer, Urano en Aries y Marte en Libra (este astro en
su retroceso por el signo de la balanza estará acoplándose toda esta semana
para formar la cruz de manera perfecta) recibirá en los próximos días la
influencia de la Luna, que primero pasará por Libra para eclipsarse en ese
signo el 15 de abril luego de tocar a Marte; posteriormente estará en Capricornio
y tocará a Plutón el 20 de abril, y el 27 lo hará en Cáncer sobre Júpiter,
removiendo las energías de los astros de la cruz.
El 15 de abril, cuando la Luna esté en Libra,
se eclipsará al colocarse en su fase llena frente al Sol en Aries, y nuestro
planeta Tierra se interpondrá entre ambos, generando una sombra hacia la Luna,
que hará que nuestro satélite se vea de color rojizo cuando el eclipse esté en
su máxima expresión a la hora universal de 07:45 GMT (3:15 de la madrugada,
hora de Venezuela, país donde este fenómeno será visible).
Debido a ese color rojizo, llaman a este
fenómeno astronómico “luna de sangre”, y nos hace pensar en el hecho de que en
esta fecha es la Luna Llena de Cristo, que derramó su sangre por la humanidad,
y en esta ocasión la Luna de Cristo se eclipsa, como una señal de los nuevos
tiempos, de la Nueva Jerusalem de la que habla el libro de mi querido hermano
Néstor Sánchez Quintero.
La fecha de celebración de la Semana Santa no
es siempre la misma, pues el punto de referencia para su conmemoración, es la
Luna Llena de Aries (Luna en Libra, Sol en Aries) y nunca ocurre este fenómeno
astral en una fecha exacta, sino entre los últimos días de marzo y las primeras
semanas de abril.
La nota clave del
influjo de esta Luna Llena, es hacer nuevas todas las cosas, empezar de nuevo,
tomar las fuerzas de la naturaleza para vitalizarse. Renovar nuestros ánimos,
nuestros hábitos, nuestras emociones, y al eclipsarse, este influjo se
magnifica, es una resurrección, y precisamente eso conmemoramos en Semana
Santa, la resurrección de Cristo, que es a la vez la resurrección de la
humanidad en estos nuevos tiempos que hemos comenzado a vivir.
Cristo fue
crucificado y en este tiempo el cielo dibuja la cruz cósmica, y en uno de los
signos de esta cruz, se eclipsa la Luna Llena de Cristo, y en el signo donde se
eclipsa la Luna, en Libra, está por causalidad del destino, el Nodo Lunar
Norte, marcando una misión y un aprendizaje relacionado con la paz, el amor, la
reconciliación y las relaciones humanas. El que tenga ojos que vea…
Es el festival del
Cristo viviente, maestro de maestros, expresión del amor de Dios. Este día del
eclipse, elevemos una oración por la paz, representada por la Luna en Libra,
pero que esto no signifique pasividad, porque en el lado opuesto está el Sol en
Aries, que nos recuerda que debemos dar la batalla por un mundo mejor.
Justamente, la Luna
Llena auspicia la integración de los opuestos, pues mientras el Sol está en un
signo, en este caso Aries, la Luna se encuentra en el signo opuesto, en esta
ocasión, Libra.
Con la Luna Llena activando al par
Aries-Libra, se despiertan energías que tienen que ver con la individualidad y
con la responsabilidad que cada quien debe tener para luchar por un mundo
mejor, sin esperar a que los demás hagan las cosas por uno.
Pero a la vez nos dice que asumir la
responsabilidad individual, no significa ser individualistas, porque el ser
humano es social, y sólo en equipo y de manera solidaria podrá lograr el
verdadero propósito de un mundo mejor.
El mismo día del eclipse Lunar, el 15 de
abril, amaneceremos con Mercurio, el astro de los procesos mentales y la
comunicación, acoplado a uno de los astros de la cruz: a Urano en Aries, provocando
un despertar de nuestra conciencia, un proceso favorable para tener visión de
futuro, para tener la mente abierta a recibir ideas aparentemente contrapuestas
de las que puede salir una síntesis integradora; es un momento en el que las
energías están propicias para que aquellos que estén en búsqueda de elevación
espiritual, se iluminen, vean el Todo; Mercurio junto a Urano nos habla de una
poderosa corriente de nuevas ideas, de nuevas formas de ver la realidad, que
nos llevarán a una profunda renovación colectiva.
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