DOMINGO, 22 DE NOVIEMBRE DE 2015
Sagitario nos conecta con el centro de la galaxia
Tomado del blog "Termómetro Zodiacal" de Pedro González Silva
Desde este 22 de noviembre el Sol recorre la franja zodiacal de Sagitario, activando su energía durante un mes. En su sentido más profundo, Sagitario nos lleva a lo más elevado de nuestro ser, nos conecta con nuestro Yo Superior, con la mente creativa, con lo inexplorado, lo infinito, la totalidad del universo.
El signo de Sagitario está alineado en dirección al centro de la galaxia, de nuestra Vía Láctea. Este centro se ubica a finales de esta franja zodiacal, a casi 27 grados de la misma, y esto equivale a decir que el 19 de diciembre, es la fecha en la cual el Sol, ubicándose en esta posición de Sagitario, se coloca en el centro de la galaxia.
El signo toma su nombre de la constelación de Sagitario, la cual se encuentra en una posición que va en dirección a la Vía Láctea. Aunque nuestro sistema solar está en esta galaxia, se halla en la parte más alejada de la misma, conectado con ella mediante el llamado “Brazo de Sagitario” que va en dirección a la constelación del mismo nombre, que a su vez apunta a nuestra galaxia.
Cuando el Sol está en Géminis (signo opuesto y a la vez complementario a Sagitario), nuestro planeta se encuentra en el punto más cercano al centro de la galaxia, y en especial cada 19 de junio, por lo tanto, el cielo que vemos en esa fecha, es el centro de la galaxia.
Entonces, el 19 de junio la Tierra está más cercana al centro de la galaxia, y el 19 de diciembre el Sol, mientras que la Tierra se ubica frente al astro rey, igualmente alineada en dirección al centro de la galaxia.
En el punto más céntrico de ese centro de la galaxia, está un campo de energía muy poderoso, un agujero negro llamado “Sagitario A”.
Se puede considerar al centro de la galaxia un punto fijo (aunque se mueve, avanza sumamente lento) que podemos ubicar en la carta astral a 27 grados de Sagitario, y que puede ser objeto de interpretación astrológica, y puede hacer aspectos (conjunciones, oposiciones, cuadraturas, trígonos, etc.) con planetas y casas de nuestro mapa astrológico.
El astrólogo español Octavio Deniz, le da la siguiente interpretación al centro de la galaxia: “Este centro se constituye como un punto de fuerza, de motivación intensamente creativo y original. Se relaciona con inventos nuevos y con el interés por el cosmos, así como con el nacimiento de una nueva espiritualidad. A medida que ese punto se activa, tanto a nivel individual, como colectivamente, traerá una mayor comprensión de nuestro papel en el desarrollo de la inteligencia cósmica”
Nosotros pensamos que todas estas cualidades que señala Octavio Deniz pueden hacerse extensivas al campo de influencia sagitariano, cuyo simbolismo lo conecta con la búsqueda espiritual y de trascendencia del ser humano; Sagitario está representado por el arquero que lanza una flecha hacia el infinito, hacia lo desconocido, hacia el universo; Sagitario busca trascender, quiere conocer lo que hay más allá, tiene una mente amplia, universalista.
A medida que el Sol avanza por el signo de Sagitario y se acerca al centro de la galaxia, esas cualidades se hacen más intensas, al conectarse con ese centro, con ese campo de energía tan poderoso.
Sagitario se relaciona con la menta abstracta, creativa, con esa mente universal, ese Todo que bien puede ser Dios, tal y como señala la primera ley universal: “Todo es Mente, el Universo es Mental”.
El signo opuesto o complementario es Géminis, que se relaciona con la mente concreta, la recopiladora de información, la comunicadora, la Mente que materializa, o como lo indica la Biblia: “El verbo se hizo carne…”
Por eso el 19 de junio, cuando la Tierra está en Sagitario, en conjunción al centro de la galaxia y el Sol frente a la Tierra desde Géminis; y el 19 de diciembre, cuando es el Sol el que está en Sagitario, en conjunción con ese centro, y nuestra Tierra frente al Sol desde Géminis, son días ideales para realizar una meditación muy especial, donde podamos, tal y como sugiere el colega Octavio Deniz, escuchar la voz de Dios, las señales del Universo, y conectarnos con la trascendencia de nuestro Ser, con nuestra esencia infinita…
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