El Dr. Salas Römer debería ayudar a resolver este lío, si tanto ama a Valencia y dejar de ser el Caín del cotarro de la valencianidad.

El Carabobeño 16 diciembre 2013

Buhoneros mantienen colapsado el centro de Valencia

 Beatriz Oliva
boliva@el-carabobeno.com

El centro de Valencia está totalmente colapsado por la gran cantidad de buhoneros. La anarquía se apoderó de las calles, aceras y avenidas, ocupadas por tarantines donde se exhiben diferentes mercancías.  

Lo que un día fueron unas aceras, calles y calzadas libres, progresivamente fueron tomadas por los comerciantes informales para instalar los tarantines dejando un trecho, casi imposible de caminar, para cientos de peatones que a diario asisten a la zona. 

Los comerciantes han ido poblando progresivamente el centro de Valencia sin que existan funcionarios policiales que puedan contenerlos, organizarlos ni delimitarlos, a pesar de que su presencia genera desorden y anarquía.   

Ante la falta de espacios para caminar por el abarrotamiento de las aceras, muchos peatones optaron por caminar por las calles, aunque deben estar pendientes para no ser arrollados por algún vehículo, porque el ancho de la vía también se redujo. 

En el centro de Valencia no solo se han instalado exhibiciones de diferentes mercancía, sino también cientos de puestos de comida rápida que venden perros calientes, papas rellenas, empanadas, pinchos, dulces y demás alimentos sin cumplir la normativa sanitaria. Estos abarcan gran parte de las calle por colocar mesas y sillas. 

Una ciudadana que prefirió no identificarse, indicó que la toma del centro por los buhoneros es culpa del Gobierno nacional porque siempre los ha apoyado en sus “vagabunderías”. “Esto no se había visto sino de hace unos 15 años para acá. Cada día se incrementa más”. 

El panorama en las diferentes calles de la avenida Bolívar de Valencia es algo parecido. Los buhoneros se apoderan de las aceras entorpeciendo el transitar de los peatones, igualmente instalan puestos de comidas. 

Gustavo Paredes expresó que es imposible transitar por las calles y avenidas por la cantidad de tarantines que se encuentran atravesados. “Si tu le llegas a decir a uno de los buhoneros que acomode el tarantín, te ganas un problema que no sabes cómo terminará”    

La comerciante informal Anabel Camaro, quien tiene nueve años instalada en la calle Díaz Moreno con Páez, manifestó estar consciente que afean y colapsan la ciudad. Dijo que han sostenido reuniones con representantes del gobierno regional para reubicarlos, pero pasa el tiempo y permanecen en el mismo sitio. “Tengo nueve años aquí y siempre desbordan una cloaca para obligarnos a desalojar”. 

Los buhoneros hicieron un llamado al Gobierno Nacional y regional para que los reubique en uno de los tantos terrenos baldíos que se encuentran en el centro, y así, las ventas se mantienen y los peatones podrán transitar libremente.