Marcharon hasta la 41 Brigada Blindada
Los jóvenes seguirán su lucha “hasta que haya un cambio real en el país”
- Los manifestantes pudieron marchar sin ningún obstáculo. (Notitarde / [Marco Montilla )
Valencia, mayo 17 (Geraldo Meneses).- Este sábado 17 de mayo, estudiantes y miembros de la sociedad civil carabobeña volvieron a calentar las calles de Valencia, con una marcha que partió desde la esquina de El Tijerazo, en la avenida Bolívar, hasta el Fuerte Paramacay en Naguanagua, exigiendo el cese de la represión castrense en las manifestaciones.
“Los estudiantes no abandonamos los espacios”, fue la principal aseveración de los miembros de la Junta Patriótica José Félix Ribas, mientras se concentraban. En el lugar, Alfredo Albornoz, representante de la organización, aseguró que después de tres meses de lucha, las demandas siguen intactas hacia el Gobierno; por ello, están convencidos que deben continuar pacíficamente haciéndose sentir, y más cuando muchos de sus compañeros han sido privados de libertad, torturados y amenazados, sentenció.
Hasta la fecha, se cuentan más de 3 mil detenciones, unos 160 privados de libertad, y un centenar de violaciones a los derechos humanos dentro del movimiento estudiantil, balance que maneja el Foro Penal Venezolano, y del cual se desprende el enfriamiento de las conversaciones entre el Gobierno y la Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
En tal sentido, los jóvenes expresaron al unísono que sus exigencias no se desgastan, y que ahora éstas entran en una nueva etapa de organización para trabajar con las bases civiles en todo el territorio nacional.
La marcha se desarrolló con tranquilidad, aunque en ciertos espacios se detenía para entregar panfletos con consignas en contra de la escasez, pidiendo libertad y mayor seguridad personal, a transeúntes y choferes. Al encontrarse frente al Hipermercado Bicentenario, los marchistas le hablaron al grupo de personas que se mantenían en cola tratando de adquirir los productos de la cesta básica regulados. Allí pidieron la unión de todos los venezolanos y aseguraron que la protesta no es contra sus compatriotas, sino a lo que denominan un gobierno corrupto y represor.
La marcha tuvo su final frente a la 41 Brigada Blindada del Ejército Bolivariano, en Naguanagua; donde los participantes arribaron sin mayor dificultad, y hasta les permitieron rodear el portón de entrada. Y es que durante todo el recorrido nuestro equipo reporteril no avistó custodia policial ni por parte de efectivos del cuerpo estadal y municipal. Solo frente al Fuerte Paramacay se hallaban algunos motorizados de PoliCarabobo. En el sitio, los convocados plasmaron consignas en las paredes en contra de lo que llaman complicidad de las Fuerzas Armadas por amparar la impunidad, mientras les gritaban a los pocos soldados presentes que dejaran el miedo.
“Los estudiantes no abandonamos los espacios”, fue la principal aseveración de los miembros de la Junta Patriótica José Félix Ribas, mientras se concentraban. En el lugar, Alfredo Albornoz, representante de la organización, aseguró que después de tres meses de lucha, las demandas siguen intactas hacia el Gobierno; por ello, están convencidos que deben continuar pacíficamente haciéndose sentir, y más cuando muchos de sus compañeros han sido privados de libertad, torturados y amenazados, sentenció.
Hasta la fecha, se cuentan más de 3 mil detenciones, unos 160 privados de libertad, y un centenar de violaciones a los derechos humanos dentro del movimiento estudiantil, balance que maneja el Foro Penal Venezolano, y del cual se desprende el enfriamiento de las conversaciones entre el Gobierno y la Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
En tal sentido, los jóvenes expresaron al unísono que sus exigencias no se desgastan, y que ahora éstas entran en una nueva etapa de organización para trabajar con las bases civiles en todo el territorio nacional.
La marcha se desarrolló con tranquilidad, aunque en ciertos espacios se detenía para entregar panfletos con consignas en contra de la escasez, pidiendo libertad y mayor seguridad personal, a transeúntes y choferes. Al encontrarse frente al Hipermercado Bicentenario, los marchistas le hablaron al grupo de personas que se mantenían en cola tratando de adquirir los productos de la cesta básica regulados. Allí pidieron la unión de todos los venezolanos y aseguraron que la protesta no es contra sus compatriotas, sino a lo que denominan un gobierno corrupto y represor.
La marcha tuvo su final frente a la 41 Brigada Blindada del Ejército Bolivariano, en Naguanagua; donde los participantes arribaron sin mayor dificultad, y hasta les permitieron rodear el portón de entrada. Y es que durante todo el recorrido nuestro equipo reporteril no avistó custodia policial ni por parte de efectivos del cuerpo estadal y municipal. Solo frente al Fuerte Paramacay se hallaban algunos motorizados de PoliCarabobo. En el sitio, los convocados plasmaron consignas en las paredes en contra de lo que llaman complicidad de las Fuerzas Armadas por amparar la impunidad, mientras les gritaban a los pocos soldados presentes que dejaran el miedo.
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