Casa de la Estrella. Donde nació la República libre y soberana de Venezuela en 1830.

Casa de la Estrella. Donde nació la República libre y soberana de Venezuela en 1830.
Casa de la Estrella, ubicada entre Av Soublette y Calle Colombia, antiguo Camino Real donde nació la República libre y soberana de Venezuela en 1830, con el General José Antonio Páez como Presidente. Valencia: "ciudad ingrata que olvida lo bueno" para el Arzobispo Luis Eduardo Henríquez. Maldita, según la leyenda, por el Obispo mártir Salvador Montes de Oca y muchos sacerdotes asesinados por la espalda o por la chismografía cobarde, que es muy frecuente y característica en su sociedad.Para Boris Izaguirre "ciudad de nostalgia pueblerina". Jesús Soto la consideró una ciudad propicia a seguir "las modas del momento" y para Monseñor Gregorio Adam: "Si a Caracas le debemos la Independencia, a Valencia le debemos la República en 1830".A partir de los años 1950 es la "Ciudad Industrial de Venezuela", realidad que la convierte en un batiburrillo de razas y miserias de todos los países que ven en ella El Dorado tan buscado, imprimiéndole una sensación de "ciudad de paso para hacer dinero e irse", dejándola sin verdadero arraigo e identidad, salvo la que conserva la más rancia y famosa "valencianidad", que en los valencianos de antes, que yo conocí, era un encanto acogedor propio de atentos amigos...don del que carecen los recién llegados que quieren poseerlo y logran sólo una mala caricatura de la original. Para mi es la capital energética de Venezuela.

martes, 23 de agosto de 2011

Invictus o una reflexión sobre la humillación, el dolor y el retraso que generó en Sudáfrica el apartheid que nos quiere imponer Fidel Castro

Nelson Mandela
Para otros usos de este término, véaseMandela (Italia).
Nelson Mandela
Frederik Willem de Klerk Thabo Mbeki
Predecesor
Frederik Willem de Klerk (presidente delEstado de Sudáfrica)
Sucesor
Datos personalesNacimiento
18 de julio de 1918 (92 años)
FirmaSitio web
Nelson Rolihlahla Mandela
(IPA: [roli'
ɬ
a
ɬ
a]) (nacido enMvezo, el 18 de juliode 1918), conocido en su país como
, abogado y político, fue el primer presidentede Sudáfricaelegidodemocráticamentemediantesufragio universalasí como el líder delUmkhonto we Sizwe, el brazo armado delCongreso Nacional Africano (CNA). En 1962 fue arrestado y condenado por sabotaje, además de otros cargos, a cadena perpetua. Estuvo 27 años en la cárcel, la mayoría de los cuales estuvo confinado en la prisión deRobben Island. Tras su liberación el11 de febrerode 1990, Mandela lideró a su partido en las negociaciones para conseguir una democracia multirracial

Cuando lei en el web site de la Alcaldía de Naguanagua esta referencia me provocó
copiarla en el blog porque me recordó lo que sentimos mi esposo y yo, cuando fuimos al cine a ver Invictus, la última película de Clint Eastwood, protagonizada por Morgan Freeman y Matt Damon.

La película recrea la vida de Nelson Mandela (Freeman) durante su gestión como Presidente de Sudáfrica, en relación a la Copa Mundial de Rugby de 1995, que se desarrollaba en ese país. Mandela ve en este evento deportivo una oportunidad para que la desintegrada y enfrentada sociedad sudafricana encuentre en la Selección Nacional de Rugby (un deporte tradicionalmente reservado para los blancos) un motivo de unión y pertenencia común (“One team, one country”, explican en la película). Para esto, Mandela requiere la ayuda de Francois Pienaar (Damon), el capitán de los Springboks (así es como llaman a su Selección de Rugby, es como “Los Pumas” en Argentina, o “Las Leonas” para el Hockey argentino. Springbok significa “gacela”. ¿Curioso, no?.



Invictus es una buena película para empezar a conocer o conocer un poquito más sobre la humillación, el dolor y el retraso que generó en Sudáfrica el apartheid, y para apreciar la solución pacífica, conciliadora y progresista que hombres como Mandela pudieron darle. Leyendo un poco sobre él, me enteré que durante su militancia más joven apoyó actividades de resistencia armada frente a los atropellos a los que eran sometidos los negros. Yo no sabía esto, y me hizo valorar aún más a Mandela como líder político y como persona, ya que al convertirse en el primer Presidente negro de Sudáfrica elegido de manera libre y democrática, al gobernar con la palabra y con el respeto irrestricto de los derechos humanos de todos los sudafricanos, sin prejuicios raciales ni de ningún tipo, sin revanchismo y sin violencia demostró que los hombres pueden evolucionar y desechar sentimientos de odio y enfrentamiento por acciones que traten de garantizar un futuro donde entremos todos.



Porque creo en la virtud del arrepentimiento, de saber darse cuenta cuando uno se ha equivocado, en la virtud de saber perdonar y saber reconciliarse, porque creo en la capacidad de las personas para evolucionar a lo largo de sus vidas y comenzar a pensar y actuar cada día un poquito más a favor de la humanidad, es por eso que me parece que Mandela fue una figura que estuvo a la altura de las circunstancias históricas en las que se encontró, y es por eso que los procesos políticos y sociales que él impulsó en su país deben ser estudiados y valorizados por todos. Distinta sería la realidad actual y hubiera sido la historia de nuestro país si tuviésemos los valores y la visión de la política y la sociedad en general que tiene Madiba (nombre con el que los negros se referian a el, debido a que ese era el nombre de su clan familiar).



Dejo un famoso fragmento de un discurso dado por Theodore Roosevelt en la Sorbonne el 23 de abril de 1910, bautizado popularmente como “The man in the arena”. Nelson Mandela le enseñó este fragmento a Pienaar antes del comienzo de la Copa Mundial de Rugby (en la película le da una copia del poema “Invictus”, escrito en 1875 por William Ernest Henley. Esto no fue así, pero lo cierto es que ese poema sí ayudó mucho a Mandela a sobrellevar sus años de prisión). Aquí la traducción del discurso, realizada por Zimermann-Tincho, de El Blog de Mancia:

“No importa el crítico; ni aquel que muestra las falencias del hombre fuerte, o en qué ocasiones aquel que hizo algo podría haberlo hecho mejor. El reconocimiento pertenece al hombre que se encuentra en el campo de batalla, con el rostro manchado de polvo, sudor y sangre; aquel que persevera con valentía; aquel que erra, que da traspie tras otro, ya que no hay ningún esfuerzo sin tropiezo ni caida. Aquél que realmente se empeña en lograr su cometido; quien conoce el entusiasmo, la devoción; aquél que se entrega a una noble causa; quién en el mejor de los casos encuentra al final el triunfo inherente al logro grandioso; y que en el peor de los casos, si fracasa, al menos caerá con la frente bien en alto, de manera que su lugar jamás estará entre aquellas almas que, frías y tímidas, no conocen ni victoria ni fracaso.”



Además, les dejo “Invictus”, el poema de Henley:
Out of the night that covers me,
Black as the pit from pole to pole,
I thank whatever gods may be
For my unconquerable soul.

In the fell clutch of circumstance
I have not winced nor cried aloud.
Under the bludgeonings of chance
My head is bloody, but unbowed.

Beyond this place of wrath and tears
Looms but the Horror of the shade,
And yet the menace of the years
Finds and shall find me unafraid.

It matters not how strait the gate,
How charged with punishments the scroll,
I am the master of my fate:
I am the captain of my soul.





Bueno, para finalizar, vale la pena comentar que el 2 de febrero de 2010, Sudáfrica celebró el 20ª aniversario del fin del apartheid. Ese día, Frederik de Klerk, último presidente durante la vigencia del apartheid y Premio Nobel de la Paz, pronunció un histórico discurso ante el Parlamento anunciando el fin de las leyes que establecían uno de los regímenes más racistas que se tenga conocimiento. Además, entre otros anuncios, declaró la liberación del preso político Nelson Mandela (nueve días después, tras 27 años de cautiverio, sería efectivamente liberado, convirtiéndose en Presidente cuatro años más tarde), la legalización del Congreso Nacional Africano (el partido en que estaba Mandela) y una nueva Constitución para el país.

actual bandera sudafricana, remplazando a la del apartheid, representando la nación arco iris, la nación sudafricana respetuosa de las diferencias


La película se estrenó un tiempo antes de que empiece a desarrollarse la Copa Mundial de Fútbol Sudáfrica 2010. Quizás sea una coincidencia, a mi me parece que es para reforzar la alta imagen positiva de la que goza Mandela en la comunidad internacional, ergo, generar una buena imagen de Sudáfrica para un momento en la que va a estar expuesta como pocas veces. Enhorabuena. Con este Mundial se cierra un ciclo que muchos sudafricanos deben haber soñado y por el que tantos deben haber trabajado (entre ellos, Mandela, claro). Quince años después del evento deportivo que unió a Sudáfrica en un solo grito, a través de un deporte que estaba reservado tradicionalmente para los blancos y que representaba la exclusión y la humillación de millones de sudafricanos, se realizará en este país el mayor evento a nivel mundial del deporte más popular entre los negros durante muchos años, desdeñado por la mayoría de los blancos. Espero que los encuentre otra vez unidos.


Ramiro Lopez Crespo

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