"De Bilbao a Naguanagua", se llama el último libro escrito hasta ahora por el doctor
Roberto Guinán Castellanos. Todavía no ha sido impreso, pero hemos leído
su versión original por la generosidad de su autor. Un libro hermoso, para decirlo
de la manera más sencilla. Roberto es, sin dudas, un cronista brillante y -también
sin duda- un hijo de esta tierra formado en una firme tradición cristiana.
Un científico profesional de la medicina que entrega buena parte de su tiempo
y de su capacidad intelectual para hurgar en el tiempo y en la historia,
en búsqueda de las remotas y hermosas raíces de nuestra propia fe. Así nos
pasea, como buen baquiano, desde los orígenes de la tradición que consagró
a la Santísima Virgen María, bajo la advocación.
De la Begoña como Patrona de Bilbao (en España) hasta la de Patrona de
Naguanagua, "donde es reina y patrona del pueblo desde el año 1787 en tiempos
de la colona de América", consagración que se produjo, como bien se aprecia,
cuatro años antes del nacimiento de nuestro Padre Libertador Simón Bolívar.
No es, pues, una referencia ligera, sino un dato histórico que nos hace
suponer que en los años de la Guerra de Independencia, cuando el Libertador
visitó a Naguanagua, seguramente, aunque ésta era apenas una pequeña
población, una pequeña aldea, debió también visitar la Iglesia y adorar (como buen vasco)
a la Virgen de la Begoña, que ya era patrona de este pueblo carabobeño.
Muchas anécdotas narra Roberto en el breve y hermoso libro, cuyas páginas
resumen, en prosa finamente trabajada, una de las historias más hermosas
de la tradición cristiana venezolana. Así, nos atrevemos a hacer este breve
comentario sin haber consultado con nuestro fraterno amigo Roberto ¿? para ello.
Lo que resta ahora es esperar la edición del libro, que seguramente será recibido
con gran satisfacción e interés de los muchos lectores, ganados por la
limpia y agradable prosa de este médico carabobeño dueño de un merecido sitial
en el privilegiado entorno de los cronistas venezolanos. Este libro, Roberto, será
también una bendición de la Virgen para quienes te admiramos y leemos con
infinito placer. Bienvenida sea, como todos tus libros, esta hermosa historia de la
Virgen cuyo peregrinaje la trajo de Bilbao hasta Naguanagua pasando por Las Canarias…
¡qué pequeño es el mundo para los pasos de la fe!
josejoaquinburgos@
hotmail.com
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