La periodista canadiense Naomi Klein participa en Roma a la Conferencia sobre el cambio climático e invita a 'invertir la ruta hacia un clima más estable y al mismo tiempo hacia una economía más justa'

Roma: cumbre sobre el clima de 17 ONGs católicas

Presentan el congreso: "Primero la población y el planeta: el imperativo es cambiar de ruta"

Por Rocío Lancho García

Ciudad del Vaticano, 01 de julio de 2015 (ZENIT.org)

"Las personas y el planeta en primer lugar: el imperativo de cambiar la ruta”. Este es el tema elegido para la Conferencia que se celebra este jueves y viernes en el Augustinianum de Roma, organizada por el Pontificio Consejo de Justicia y Paz y la CIDSE, red internacional de 17 ONG católicas para el desarrollo con base principalmente en Europa y Estados Unidos.

Para presentar el evento, han acudido esta mañana a la sala de prensa de la Santa Sede, la subsecretaria del mencionado dicasterio, Flaminia Giovanelli; la escritora y periodista Naomi Klein; el profesor Ottmar Edenhofer, co-director delIntergovernmental Panel on Climate Change (IPCC); y el secretario general de la CIDSE, Bernd Nilles.

Estaba prevista la presencia del cardenal Peter Turkson, pero debido a que se encuentra en un viaje, la señora Giovanelli ha pronunciado en su nombre el discurso. De este modo, ha recordado que la cuestión central que pide el Santo Padre en la encíclica es: ¿Qué tipo de mundo queremos dejar a quienes nos sucedan, a los niños que están creciendo?  “Simplemente no puede ser un ambiente incapaz de sostener la vida, ni un lugar de interminables conflictos entre los pueblos”, ha precisado.

Igualmente, ha indicado que el programa de la conferencia se centra en el cambio climático. Haciendo referencia nuevamente a la reciente encíclica del Papa, ha recordado que “él reconoce un consenso científico muy sólido sobre el fuerte calentamiento del sistema climático”. Esto es principalmente --ha asegurado-- el resultado de la actividad humana, es decir, el uso intensivo y creciente de combustibles fósiles. En general, ha observado la subsecretaria, “el cambio climático es un problema global con un espectro de consecuencias graves: ambientales, sociales, económicas y políticas”.

Asimismo, la señora Giovanelli ha asegurado que la Conferencia COP21 sobre cambio climático, que tendrá lugar en París del 30 de noviembre al 11 de diciembre, será crucial en la identificación de soluciones fuertes para el cambio climático, "acompañados de la elaboración gradual y la aceptación de compromisos vinculantes".  Finalmente, ha subrayado que la dimensión política tiene que restablecer el control democrático sobre la economía y las finanzas, es decir, sobre las opciones básicas realizadas por las sociedades humanas.

Por su parte el profesor Ottmar Edenhofer, coopresidente del Panel intergubernativo sobre cambio climático expuso la encíclica 'Laudato Si' en siete puntos. 

 

1- La encíclia indica el cambio climático, la pobreza y la inequidad como la llave ética de los cambios del siglo XXI. Por esta razón es inapropiado reducir la encíclica al 'ambientalismo' o como una 'encíclica climática'.

 

2- La encíclia se refiere a la admósfera como una propiedad común de la humanidad, un bien común de todos y para todos.
 

3- El papa Francisco argumenta que la pobreza y el cambio climático se pueden resolver solamente de manera conjunta, y si se falla en resolver uno de estos dos puntos se fallará también en el otro.
 

4- Es fundamental un esfuerzo global, de las clases altas y medias, para dejar de usar inmediatamente los productos con gases que dañan la atmósfera, ya que el cambio climático tendrá efectos que principalmente dañarán a los pobres y en el futuro exacerbarán la desigualdad.

5- Tasar el uso de carbón para financiar un desarrollo sostenible.
 

6- La encíclica sugiere que la solución a esta crisis global se puede encontrar solamente con una cooperación internacional, que involucre las naciones, estados, entes locales, familias y a todos los niveles individuales.
 

7- La encíclica llama con urgencia a un diálogo entre ciencia, política, economía y religión.

 

Las ONGs que participan a la cumbre son:

Broederlijk Delen- Bélgica (www.broederlijkdelen.be)
•CAFOD– Inglaterra y Gales (www.cafod.org.uk)
•CCFD-Terre Solidaire– France (www.ccfd-terresolidaire.org)
•Center of Concern– Estados Unidos (www.coc.org)
•Cordaid– Suecia (www.cordaid.nl)
•Development & Peace– Canadá (www.devp.org)
•Entraide et Fraternité– Bélgica (www.entraide.be)
•eRko– Eslovaquia (http://en.erko.sk)
•Fastenopfer– Suiza (www.fastenopfer.ch)
•FEC– Portugal (www.fecongd.org)
•FOCSIV– Italia (www.focsiv.it)
•Fondation Bridderlech Deelen– Luxemburgo (www.bridderlechdeelen.lu)
•KOO– Austria (www.koo.at)
•Manos Unidas– España (www.manosunidas.org)
•MISEREOR– Alemania (www.misereor.de)
•SCIAF– Escocia (www.sciaf.org.uk )
• Trócaire– Irlanda (www.trocaire.org)

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La activista Naomi Klein alaba la valentía de Laudato si'

La periodista canadiense participa en Roma a la Conferencia sobre el cambio climático e invita a 'invertir la ruta hacia un clima más estable y al mismo tiempo hacia una economía más justa'

Por Rocío Lancho García

Ciudad del Vaticano, 01 de julio de 2015 (ZENIT.org)

Naomi Klein, la conocida periodista y activista canadiense, ha reconocido que lo que dice el Papa Francisco en la encíclica Laudato si’, “no es solo una enseñanza para el mundo católico, sino para cada persona que viva en este planeta”. Lo ha dicho durante la presentación  en el Vaticano de la Conferencia “Las personas y el planeta en primer lugar: la necesidad de cambiar el rumbo”, organizada por elPontificio Consejo de Justicia y Paz. Asimismo ha reconocido que “como feminista judía no practicante me siento sorprendida de haber sido invitada al Vaticano, esto ciertamente me habla también a mí''.

Desde el punto de vista de la conocida activista no global, autora del 'best seller' No logo, sobre los abusos de las multinacionales en los países en desarrollo, añadió que, “en un mundo donde el beneficio se coloca constantemente antes que las personas y el planeta, la economía del clima tiene mucho que ver con la ética y la moral”. Además, ha precisado que “si estamos de acuerdo que poner en peligro la vida en la tierra es un problema de conciencia, entonces nos corresponde a nosotros actuar moralmente”.

Esto significa, ha observado, buscar metas, “políticas que regulan directamente la cantidad de carbono que se puede extraer de la tierra. Significa políticas que nos lleven a conseguir el cien por cien de energía renovable en dos o tres décadas y no a finales de siglo”. Y significa también “la asignación de recursos comunes y compartidos, como la atmósfera, sobre la base de la justicia y la equidad''.

Al respecto, ha hablado de un nuevo tipo de movimiento en defensa del clima  que está emergiendo rápidamente. Un movimiento que se basa en la verdad “más valiente expresada en la encíclica”: que nuestro sistema económico actual al mismo tiempo que alimenta la crisis climática nos impide tomar las acciones necesarias para evitarlo. Por eso ha hablado de “invertir la ruta hacia un clima más estable y al mismo tiempo hacia una economía más justa”.

La periodista ha advertido que “la puesta en juego es tan alta, el tiempo tan corto y la tarea tan grande que no podemos permitirnos el lujo de dejar que las diferencias nos dividan”.

Haciendo referencia a la cumbre COP que tendrá lugar a finales de año en París, la señora Klein ha asegurado que “puedo afirmar que habrá tolerancia cero para otro fracaso disfrazado de éxito ante las cámaras”. Por eso ha afirmado que si el acuerdo no logra reducciones inmediatas de emisiones al tiempo que proporciona un apoyo real y sustancial para los países pobres, entonces será declarado un fracaso.

Del mismo modo, ha observado que “no es demasiado tarde para desviarse del camino peligroso que nos está llevando hacia 4 grados de calentamiento”, aunque sí “sería difícil, sin duda”. Pero --ha añadido--- difícil no es lo mismo que imposible.

Por eso ha concluido precisando que “renunciar a una tarea que podría salvar incontables vidas y evitar tanto sufrimiento, simplemente porque es difícil, costoso y requiere sacrificio de los que pueden permitirse vivir con menos no es pragmatismo”. Es --ha asegurado-- rendirse de la manera más cobarde.