El Carabobeño 08 marzo 2013

Mujeres celebran hoy su día con la serenidad que el país reclama

En este día se celebra la lucha por su participación igualitaria. (Foto El Carabobeño)

Marielis Arteaga | marteaga@e-carabobeno.com

En el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer, una vez más, la situación tan particular por la que transita Venezuela en estos momentos, significa para Sonia Ramírez de Manzano, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio de Valencia, demostrar de qué madera está hecha.

Pocas horas antes de la celebración del 8 de marzo, su oficina era una vorágine de llamadas, correos y visitas de comerciantes y empresarios que llenos de incertidumbres y dudas, exigían orientación. ¿Abrimos o no? Ella con aplomo y diligencia debía fijar una posición que diera muestra de su dilatada trayectoria profesional.

Mientras se le rinde tributo a las mujeres en todo el mundo, en nuestro país, el tema álgido para los comercios es el de la seguridad social. El de resguardarse en momentos de “tensa calma”.

Ramírez está acostumbrada a los retos. Luego de 27 años al frente de la gerencia del sector de Agua Potable de Hidrocentro para la región central, se jubiló como era previsible pero su espíritu incansable no la llevó al sosiego de su casa, en cambio, la llevó a tomar la batuta como directora de la cámara hace cuatro años.

Desde entonces se encarga de planificar, organizar pero sobre todo, hacer cumplir las decisiones tomadas por un gremio atado a una difícil situación económica. El día a día le exige estar a tono con el acontecer nacional, sin tregua. La actualidad y los vaivenes demandan largas horas de trabajo para esta mujer casada desde hace 40 años, madre de dos hijos y abuela de dos pequeños.

¿Cuál es el secreto para conseguir un balance? “La planificación y entender que no es cantidad sino calidad. Las mujeres nos hemos acostumbrado a ser profesionales, esposas, madres y a hacerlo bien. Yo siempre he preparado el desayuno para mi familia, al salir ya dejé el almuerzo listo y no he descuidado mis obligaciones con la familia. Sí, es un reto pero las mujeres estamos llamadas al éxito. A conquistar espacios que antes no aceptaban mujeres”, enfatiza.

Responder a todo cabalmente

La serenidad de seguro ha sido un arma vital para María Elena Barreto, directora ejecutiva y presidenta del Dividendo Voluntario para la Comunidad (DVC), porque haber sido esposa, madre y enfrentarse al drama que se vive en los barrios sin desesperar, no ha tenido que ser tarea fácil.

Esta mujer que durante los últimos 22 años ha trabajado por materializar seis comedores en zonas necesitadas del estado Carabobo para alimentar a los niños más desprovistos, al tiempo que coordina los programas de conservación ambiental y de creatividad infantil es una convencida del papel protagónico de la mujer en esta época.

“En lo barrios he comprobado que muchas mujeres llevan todo el peso del hogar. Son madres trabajadoras. Veo el trabajo de las mujeres voluntarias, coordinadoras de los comedores que son humildes pero tan abnegadas para cumplir con los objetivos que tenemos, comentó Barreto. Cree que si la mujer tropieza, entiende lo que se necesita y sigue por eso ha conseguido espacios en todos los ámbitos.

Decía ¡Somos lo más valioso que Dios creó! Cuando, Amelia Rodríguez, presidenta del DVC desde hace un año -pero con seis dentro de la junta directiva- se encontraba a su lado, sacando cuentas que no le cuadraban.

No hay dinero suficiente para mantener el trabajo loable que realizan en los comedores. ¡Siempre es lo mismo!, intervino una entusiasta Rodríguez.

La presidenta cree todo el esfuerzo vale la pena. “El balance de lo que has hecho lo tienes al final de tu día. Es verdad, por ratos en tu vida, a veces eres más madre, otros ratos esposa y otros más, profesional pero casi siempre cumplimos con todo simultáneamente.

Mujer apasionada y madre luchadora

Ser madre de seis varones no le ha impedido a esta mujer apasionada, ser una verdadera luchadora social desde la dirigencia comunal en Los Colorados. Hablamos de Carmen Olaizola, dirigente comunal, de la Unidad de Contraloría.

Ha dedicado diez años de su vida a trabajar, primero desde la asociación de vecinos y ahora, desde la Unidad de Contraloría del Consejo Comunal. Su norte es responder a todas las necesidades de su comunidad a cualquier hora.

“La lucha es bastante es fuerte pero cuando uno ama lo que hace no te detienes. Se debe hacer un trabajo cabal. Debes dedicarle tiempo a todos tus roles pero con amor”, no duda en decir.

No son pocas las veces que debe levantarse de madrugada para responder por fallas eléctricas o de otro servicio pero siempre cuenta con el apoyo de sus vecinos, los cuales la han reelegido por ser “quien de verdad nos escucha y entiende”, tal como le manifiestan. Se siente feliz por los beneficios que ha logrado para su gente “con lo mucho o poco que el gobierno nos pueda dar”.

Antecedentes históricos

El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer constituye un homenaje a todas las féminas del mundo. Es un día para reconocer la constante lucha que libran por ser cada día mejores, no sólo con el afán de ganar espacios nunca antes conquistados sino para ser partícipes de las transformaciones que mueven al gran entramado social.

En este día se celebra la lucha por su participación igualitaria en el mundo del trabajo y en la sociedad. Su proclamación se dio luego de la propuesta de la dirigente comunista alemana Clara Zetkin, integrante del Sindicato Internacional de Obreras de la Confección, que propuso celebrar anualmente un día de acción universal por los derechos de paz y progreso social de todas las féminas.

Esta fecha comenzó a rememorarse a partir de 1911, pero su continuidad se interrumpió abruptamente por los acontecimientos mundiales de la época y fue retomada después de la II Guerra Mundial, bajo el impulso de la Federación Democrática Internacional de Mujeres.

En Venezuela durante el Gobierno de Medina Angarita en 1944 se comenzó a conmemorar esta fecha en todo el país con la participación masiva de las mujeres, quienes llevan sus consignas, destacan sus metas de lucha, además de la igualdad de oportunidades y hacen un llamado para seguir trabajando todos juntos por una sociedad mejor y más justa.