Desayuno en la Redacción

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Damiano Del Vescovo, presidente Cámara de Comercio de Valencia.

Guillermo Manosalva, coordinador Un millón de amigos por el Metro.

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11:02 pm 03-09 |  
Coincidieron Guillermo Manosalva, Damiano Del Vescovo y Juan Carlos Cárpico , quienes exigieron al Ejecutivo Nacional que presente un cronograma para que la ciudadanía esté al tanto de la culminación del subterráneo 

"Si en tres semanas no inicia el Metro Valencia debe tomar otra actitud"

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Tras casi dos años de hermetismo, donde los valencianos se han enfrentado a diario con una ciudad invadida por el caos, el congestionamiento, problemáticas de salud pública y hasta inseguridad, generados por las actualmente paralizadas obras del Metro de Valencia, hoy -un año y 10 meses después que la empresa constructora detuviera los trabajos del subterráneo por falta de pagos- el Ejecutivo Nacional anunció que serían "reorientados" 400 millones de bolívares para el "reimpulso" del proyecto.

Según las estimaciones del propio Gobierno, la obra debió culminar este año, sin embargo, lo que para 2011 prometían como el tramo dos de la línea uno del Metro, la cual trasladaría a más de 100 mil pasajeros diarios desde la estación de la Cámara de Comercio hasta Guaparo, hoy no es más que una obra que se ha convertido en la razón de llamados, exhortos, titulares de prensa y hasta manifestaciones, de un pueblo que durante todo este tiempo no había recibido respuestas.

La cifra recientemente anunciada por el Ministerio de Transporte y Comunicaciones (MTC) son 93 millones de dólares (Bs. 400 millones), que si bien pudiese sonar esperanzadora para realizar el "reimpulso" de los trabajos, se desvanece cuando se equipara con la suma que el Gobierno adeuda al consorcio Ghella Sogene, empresa italiana encargada de la ejecución del Metro, a la cual se les adeudan cerca de 250 millones de dólares.

No obstante, el ministro de Transporte y Comunicaciones, Francisco Garcés, anunció que en tres semanas arrancarían los trabajos, sin embargo, surgen algunas incógnitas como ¿podrá reclutar la empresa a todo el personal obrero a tiempo?; ¿las máquinas que han estado paralizadas por casi dos años, estarán aptas para reactivarse para esa fecha?; ¿solventará la contratista las múltiples demandas laborales de trabajadores que se vieron sin empleo, luego que Ghella en 2009 paralizara las obras por la falta de asignación de recursos por parte del Ejecutivo?

Estas y otras interrogantes fueron planteadas sobre la mesa del "Desayuno en la Redacción" de Notitarde, la cual en esta oportunidad, recibió como invitados a Guillermo Manosalva, coordinador de la asociación "Un millón de amigos por el Metro", Juan Carlos Cárpico, presidente de la asociación Propuestas para Valencia (Provalencia), además de ingeniero especialista en túneles y ex trabajador de la Ghella Sogene, y al presidente de la Cámara de Comercio de Valencia (CCV), Damiano Del Vescovo.

Los visitantes fueron atendidos por el presidente de Editorial Notitarde, Ricardo José Degwitz; Margarita Jiménez Márquez, miembro de la junta directiva del diario; además de la editora diurna, Alecia Rodríguez Del Valle; el periodista Francisco Briceño y quien suscribe este trabajo.

Entre las problemáticas del Metro, en la actualidad la situación se vislumbra ante la información dada por el Gobierno de reiniciar las labores en tres semanas, anuncio al que los invitados coincidieron "si en tres semanas no están trabajando en las obras del Metro, Valencia tiene que tomar otra actitud".

Con 93 millones de dólares "es imposible" hacer los túneles

Con relación a los recursos asignados, Guillermo Manosalva, indicó que con 93 millones de dólares "es imposible" realizar los túneles como lo anunció el ministro Garcés.

"El Ministro dice que los 400 millones de bolívares están destinados para la construcción de los túneles que conforman el tramo dos de la línea uno, pero con eso es imposible que se hagan los túneles, ni siquiera comenzarlos", alertó.

De igual forma, mostró su preocupación al citar que el representante de la cartera de Transporte y Comunicaciones había indicado que dichos fondos también serían empleados para la reparación de la avenida Bolívar, acción que dijo quizá podría ser el verdadero destino de los 400 millones de bolívares.

"Creo que para solventar el asunto y bajarle el ánimo de pelea a los valencianos, pudieran arrancar inyectándole recursos es a la reparación de las vías alternas (...) él (ministro Garcés) habló de 93 millones de dólares que sí serían suficientes para hacer algunas reparaciones a la vialidad de las áreas adyacentes, pero no para arrancar la obra como tal", sentenció.

En este sentido, Damiano Del Vescovo coincidió con Manosalva y calificó de "pírrica e irrisoria" la cantidad anunciada por el Gobierno para iniciar las obras del subterráneo valenciano.

"El proyecto requiere 700 millones de dólares, evidentemente que 93 millones no alcanzarán para arrancar (...) es una insatisfacción que hayan aprobado solamente 400 millones de bolívares, es una cantidad pírrica e irrisoria para lo que realmente se requiere", puntualizó el representante gremial.

Reinicio de obras se podría evidenciar es para enero

Por otra parte, Juan Carlos Cárpico sostuvo que existen diversas variables que podrían hacer que el reinicio al 100% de los trabajos del Metro se puedan evidenciar para el mes de enero de 2012.

El experto en construcción de túneles sostuvo que la máquina encargada de la excavación y generación del túnel, conocida como topa Beatriz, por haber estado parada por casi dos años podría generar inconvenientes, no solo de mantenimiento, que pudiesen crear más contratiempos para el desarrollo de la obra.

"La topa es un equipo que está diseñado para trabajar 24 horas constantemente y si no está trabajando deja de producir, lo que ha generado un daño a la empresa", sostuvo el ex trabajador de Ghella, quien además indicó que eso podría generar una indemnización a la que debe responder el Gobierno.

Asimismo, indicó que el costo de los recursos para trabajar han aumentado, razón por la que -dijo- el Ejecutivo se vería obligado a "renegociar" los montos de cada una de las partidas del presupuesto, pues lo que hace dos años tenía un precio, actualmente dicho costo ha aumentado.

"En estos dos años ha habido aumento y escasez, las cabillas aumentaron un 300%, el cemento un 50%, los agregados como la arena y la piedra un 150%, el personal un 100% porque han habido dos aumentos cada año; es decir, los precios por metro cuadrado de construcción van aumentar y fácilmente será el doble", advirtió el ingeniero.

En este mismo orden de ideas, el coordinador de la asociación civil "Un millón de amigos por el Metro", especificó que producto del aumento del dólar de Bs. 2,15 a Bs. 4,30 lo que el Ejecutivo tenía proyectado invertir para el desarrollo del Metro, actualmente se incrementará.

"En el presupuesto se incluyen en costo de los materiales, la mano de obra, maquinaria y equipos, eso en el momento dio un valor que para los efectos de la economía venezolana trabajan con dólares (...) todas esas partidas van a tener un aumento del doble y eso lo que hace es generar un daño a las finanzas, al patrimonio financiero de la nación", denunció Manosalva, al tiempo que expuso que anteriormente la Compañía Anónima Metro de Valencia (Valmetro) aseguraba que la obra costaría 300 millones de dólares, no obstante, el ministro Garcés anunció que lo que se requiere son 780 millones de dólares.

En dos años podrían despejar la avenida Bolívar

Si bien el retraso en la culminación del Metro causa desaire a la población valenciana, carente de sistemas de transporte masivo de calidad, lo que realmente ha afectado aún más a la colectividad es el "embudo" en el que se ha convertido la avenida Bolívar, a raíz de los desvíos generados por los trabajos del subterráneo.

En tal sentido, Juan Carlos Cárpico estimó -de acuerdo a lo anunciado por el Gobierno de culminar las obras para 2015- que en aproximadamente dos años, si todo transcurre de la mejor manera, se podría reabrir la vialidad en la avenida Bolívar Norte de Valencia.

"En dos años podemos tener la obra gris, que es lo que más nos afecta, es decir, nos pueden devolver las calles, después continuarán los trabajos abajo sin que nos demos cuenta, como el acabado de las estaciones y tendidos eléctricos, en dos años pueden tener la avenida Bolívar libre para poder circular", adelantó.

De igual forma, el presidente de Propuestas para Valencia, reveló que para 2013 las estaciones ubicadas en la Cámara de Comercio (Rafael Urdaneta) y en el Rectorado de la Universidad de Carabobo (Francisco de Miranda), pudiesen estar listas, pues las mismas poseen un 85% y 70% de avance respectivamente.

Paralización de obras ha causado pérdidas del 48% a comerciantes

Otro de los flagelos que han venido sumando los trabajos del proyecto de transporte urbano en la ciudad, han sido las pérdidas económicas que han ocasionado a los comerciantes, ubicados en zonas obstaculizadas por los desvíos del Metro como El Viñedo, Majay y Guaparo.

A propósito de ello, el presidente de la CCV Damiano Del Vescovo, explicó que de acuerdo a las estadísticas más recientes aplicadas por la organización a la que representa, para julio del presente año, de 2 mil 150 locales comerciales, 240 han tenido que cerrar, mientras que para los que han logrado subsistir ante el embate del Metro, han registrado pérdidas de un 48% en las ventas.

"Durante los dos últimos años no ha crecido el empleo, lo que no debería ser por tratarse de un área comercial, si de esos 240 locales se promedia 4 o 5 empleados por local, son casi mil trabajos directos que se perdieron", precisó el economista.

Niveles de ruido por encima de los permitidos por la OMS

Aunado a las problemáticas económicas que han ocasionado las obstaculizaciones en la avenida Bolívar a raíz de las obras del Metro, producto del alto flujo vehicular que a diario circula por tan importante vía, los índices de ruido que genera el parque automotor que allí transita diariamente, -según reseñó un estudio de "Un millón de amigos por el Metro"- están muy por encima de lo permitido por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Es así como, Guillermo Manosalva aseguró que "los niveles llegan a estar por encima de los valores normales que la OMS establece, que son de 60 decibeles, la principal actividad productora del ruido es el tránsito, medios de transporte como los autobuses superan los 100 decibeles, estamos hablando de casi un aeropuerto", concluyó.

Deben anunciar con qué dinero y en qué tiempo realizarán la obra

Ante esta situación, Guillermo Manosalva fue enfático al señalar que el Gobierno debe entregar un cronograma en el que se informe cuántos serán los recursos y en qué tiempo realizarán los trabajos.

"El Gobierno debe dar un cronograma específico de cuántos bolívares o dólares le faltan a la obra, qué cantidad de trabajos hacen falta y cómo están programando en el tiempo la construcción", aseveró, mientras dijo que deben mantener informada a la ciudadanía y a los comerciantes para que el pueblo esté al tanto de los avances y novedades sobre el proyecto del subterráneo valenciano.

Escenario futuro y posibles salidas a la problemática

Si bien el Gobierno anunció que reimpulsará los trabajos del Metro de Valencia, aún se desconoce el cronograma en el que realizarán el financiamiento de la obra. Lo que sí quedó claro sobre la mesa del Desayuno en la Redacción es que independientemente de cómo el Gobierno actúe, aún pasarán -como poco- cuatro años para culminar los trabajos, período en el que continuará la problemática del tránsito en la ciudad.

De esta manera, Juan Carlos Cárpico insistió en la creación de un sistema de transporte urbano paralelo al subterráneo, que pueda suplantar al Metro en las zonas en las que éste aún no llega. Dicha petición fue ratificada por Manosalva, quien reveló que en 2008 Metroval había prometido un sistema denominado Ruta Alimentadora del Metro de Valencia (Ramval), a donde -según dijo- ya se habrían otorgado dos unidades, sin embargo, hasta la fecha, ninguna respuesta sobre ello se ha planteado por parte de los organismos oficiales.

Cárpico consideró que para iniciar el tramo tres de la línea uno (Guaparo-Bárbula), se deben tomar medidas preventivas. "Si en la avenida Bolívar que es ancha hay problemas, en la avenida Universidad si no se planea un proyecto prudente, será un caos.

En otro orden de ideas, Cárpico además mencionó que cuando pongan nuevamente en operatividad la topa, por el consumo de energía que ésta genera (2 mil 500 kilovatios), hay probabilidades de que surjan racionamientos eléctricos en algunas zonas de la ciudad, debido a que la mencionada máquina no puede funcionar con planta eléctrica.

Paralelo a ello, el ingeniero explicó que para evitar que existan futuras paralizaciones de la obra, el Gobierno debe crear un fondo o fideicomiso en el que se garanticen los recursos a la contratista y así no surjan eventualidades en el futuro.

Un punto en común, un sentido único, un objetivo; sin lugar a dudas el foco en el que coincidieron los invitados a la cita con Notitarde fue en el exhorto a la población, a estar atentos sobre los nuevos pronunciamientos del Ejecutivo para ser garantes del correcto avance del proyecto urbanístico, tan ansiado por los valencianos. Al mismo tiempo, el exhorto fue enfático para todos los diputados de la Asamblea Nacional por Carabobo, quienes como políticos representantes de la entidad deben velar porque las problemáticas sean resueltas con prontitud.

Un mil millones 32 mil bolívares costaría el Metro

A pesar de que el Ejecutivo Nacional solo ha anunciado 400 millones de bolívares para el Metro, recientemente el coordinador general de la Alcaldía de Valencia, Marcos Meléndez, manifestó en una rueda de prensa que la obra costará un total de un mil millones 32 mil bolívares, de los cuales -según el funcionario- serían destinados en una primera etapa 987 millones de bolívares.

Cabe resaltar que las declaraciones de Meléndez fueron anunciadas posterior a la realización del presente Desayuno en la Redacción. Quedará esperar a que los altos funcionarios del Ejecutivo Nacional ratifiquen la información suministrada por el Coordinador General del ayuntamiento valenciano.

Ventana

Hay que devolver la paz a la ciudad

Entre sueños por una mejor calidad de vida y poder atravesar la ciudad en el subterráneo, además del realismo vinculado con que aún faltan algunos años para ver el tramo 2 del Metro terminado, los invitados ofrecen puntos de vista que coinciden en un solo sentimiento: devolver paz, tranquilidad y comodidad a Valencia.

Damiano Del Vescovo Rojas, presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, empresario con estudios de economía en la Universidad de Bari, en Italia, es uno de los valencianos que representa a buena parte de los afectados por la paralización de los trabajos.

Este emprendedor que lleva 30 años de casado y padre de tres jóvenes, confiesa que su motivación es crear o sentar las bases de una mejor calidad de vida de los valencianos. "Mi idea es que con la participación de todos, logremos una mejor ciudad, vivible, amable, de progreso y bienestar", sostiene.

Del Vescovo Rojas añade además que la ciudad es de todos, no del alcalde ni del gobernador, ni siquiera del Presidente, por ello insiste en la influencia sobre las políticas públicas para el mejor vivir de todos los valencianos.

Entre tanto, Guillermo Manosalva, valenciano de pura cepa -como se describe- ingeniero civil egresado de la Universidad de Carabobo en 1983, casado y con dos hijos, comenta que su sueño es ir a las corridas de toros en la Monumental tomando el Metro desde el norte de la ciudad.

"Tengo 30 años soñando con eso, con disfrutar y regresar con seguridad a cualquier hora de la noche al sitio donde vivo", señala.

Pero su sueño va más allá y es que pide una avenida Bolívar libre, despejada y convertida en un verdadero bulevar para el disfrute de espectáculos públicos, para así encontrar en la capital carabobeña, un pedacito de lo moderno y atractivo del turismo europeo.

Juan Carlos Cárpico aun recuerda sus tres años de trabajo en la topa Beatriz, mientras excavó el túnel entre Plaza de Toros y Las Ferias. "Es triste esto porque uno ve programas internacionales donde obras de gran envergadura se terminan rápido y aquí llevamos más de 10 años en esto", explica.

Cárpico, quien es ingeniero civil especialista en túneles y puentes, casado y padre de una bebé de 3 meses, lamenta que "a veces se juega con la gente y generas desilusión y desesperanza" tras mencionar que hay que ser realistas y develar la verdad sobre el Metro.